I. Deconstrucción de la familia - Derecho de familia, sexualidad, género y persona humana - Libros y Revistas - VLEX 980634204

I. Deconstrucción de la familia

Páginas19-48
19
DERECHO DE FAMILIA,SEXUALIDAD,GÉNERO Y PERSONA HUMANA (EL DEBATE DEL SIG LO XXI)
I.
DECONSTRUCCIÓN DE LA FAMILIA
Las instituciones más que los conceptos de matrimonio, familia y paren-
tesco; están actualmente sometidos a un intenso y complicado debate, plantea-
do desde lo ideológico del género. Se piensa, en algunos sectores, que estas
instituciones natura les y sociales, están atr avesando una profunda crisis, la
cual no pueden superar; mientras que otros, menos confiados, y desde el mis-
mo movimiento ideológico, creen que estas instituciones están en plena evolu-
ción para adaptarse a los nuevos tiempos. Por último, están los que sostienen
que en lo sustancial no han sufrido ningún cambio en su esencia, mantenién-
dose inalterables.
Esa es la premisa que, desde la denominada deconstrucción (desmantelar,
derribar, desmontar, cfr. 1.2, infra) de la familia se señala, para desde allí, en el
debate, insistir en lo fundamental; para desde la misma familia, a través de su
ideologización, se llegue a cambiar los elementos en que se fundamenta, espe-
cialmente los conceptos hombre y mujer, matrimonio y parentesco.
Desde el contexto que antecede, el Derecho de Familia, que tiene como su
centro la protección del ser humano como sujeto dotado de dignidad, como
conjunto de normas, reglas y principios jurídicos que rigen las relaciones fa-
miliares; se encarga de regular la s relaciones e ntre las personas unidas por
vínculos sanguíneos, de afinidad o los creados por la legislación; así como
está organizado por pautas multidisciplinarias que regulan la sociedad con-
yugal, la paterno-materno-filial, como por las instituciones de protección fami-
liar; teniendo además como propósito ordenar las relaciones interpersonales y
patrimoniales entre todos aquellos que integran la realidad familiar.
El concepto así estructurado, ante el anunciado debate, se pone a prueba y
en especial la familia y su capacidad para mostrar fortaleza, que se verá si puede
o no contener la constante penetración ideológica que la asecha; y esto unido al
concierto capitalista (el capitalismo privado y el capitalismo de Estado), del cual
se aprovecha lo ideológico; pues para el capitalismo también resulta oportuna
la reestructura ción de la familia en sus principios y va lores fundamentales,
pertenecientes al matrimonio y la unión de hecho, la filiación, la dignidad de la
persona humana, el derecho a la vida, la adopción, la procreación, los conceptos
20
GILBERTO GUERRERO-QUINTERO
hombre-mujer; y esta reestructuración encauzada a que la familia se convierta
en un instrumento para que produzca y consuma más y más. Desde luego que lo
ideológico del género no tiene como finalidad la pretensión consumista sino la
deconstrucción de la familia y sus instituciones, pero dialécticamente sabe servirse
del capitalismo para su inculturación en la familia y la sociedad.
¿Quién no ha bla de igualdad de género? El discurso constante sobre la
igualdad de género, se ha inculturado en la sociedad formando par te de la
misma, sin que la mayoría conozca en qué consiste esa igualdad que se ofrece
y cuáles las fuentes ideológicas y filosóficas que la nutren. Desde esta perspec-
tiva, ¿qué es género y en que consiste la igualdad de género? ¿El hombre y la
mujer son iguales? También se habla con insistencia d el feminismo, pero, ¿en
qué consiste el mismo? ¿El feminismo busca igualar la mujer al hombre, supe-
rarlo, liberarse de este? Se señala también que no existen los conceptos hombre
y mujer, masculino y femenino, así como el sexo; que carecen de sustentación
en la realidad, que lo que sí existe es el género, pues estos conceptos son de
construcción cultural. ¿Cómo se explica todo esto? Todo esto tiene una expli-
cación ideológica y se encuentra dentro de un proceso de ideologización. En
este caso, ¿qué es la ideología y cómo opera la ideologización?
Para el feminismo radical (v. IX) todo lo que se relaciona con sexo y
género, es de construcción cultural, y esta afirmación es una constante en el
discurso ideológico. Sin embargo, desde el mismo feminismo radical se ve
insegura la calificación «construcción cultural»; pues se afirma que «el género
no puede ser visto enteramente como una construcción cultural, lingüística o
política. Existen procesos individuales de orden psicológico que se suman y
se hallan en un registro diferente al de la cultura, el lenguaje y las relaciones
de poder que construyen el género pa ra cada individuo. El significado - el
meaning - es siempre particular, psicológicamente hablando, para cada indivi-
duo. El sentido del género para cada persona - su identidad o su subjetividad
de género - es el resultado de una fusión inextricable de significados personal-
mente creados (emocionalmente y a través de fantasías inconscientes) y de
significados culturales2.
Aquí es importante subrayar que, como señalamos en la introducción,
existe una confusión lingüística de gran magnitud en torno a todos esos con-
ceptos. Se crean palabras nuevas para establecer un lenguaje propio y el des-
concierto estratégico sobre el significado de las mismas, lo cual genera mayor
atención y confusión. El doble pensamiento y el mantenimiento de dos ideas
contradictorias al mismo tiempo. Todo un proceso dialéctico para que la per-
sona asuma el lenguaje atrayente, deje «el lenguaje viejo» y asimile «la nove-
dad». Es un proceso de inculturación, que ocurre cuando la familia, como
grupo e institución social, recibe y adopta las formas culturalesque provienen
de otrogrupo. Es la «nueva cultura».
2Raquel Osborne y C ristina Mol ina Peti t, «Evol ución del concepto de género», https://
dialnet.unirioja es, consultado el 2 de en ero de 2021.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR