Para la valuación del hecho particular
| Autor | Franz Exner |
| Páginas | 325-345 |
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Biología Criminal
en sus rasgos fundamentales
caPítulo V
Para la ValuaciÓn del HecHo Particular
25. la caliFicaciÓn BiolÓgico -criminal
No es tarea de este libro dar una enseñanza para la práctica de la investi-
gación y de la calicación biológico-criminal. Esto supondría el desarrollo de
una tipología del delincuente, pues la calicación biológico-criminal signica
la ordenación del caso particular dentro de ciertos tipos, y aunque la tarea
del calicador no queda aún terminada con esta tipicación, no obstante, ella
forma la base indispensable para sus posteriores consecuencias prácticas. En
el capítulo XVIII hemos dado solamente los comienzos de una tipología se-
mejante. Y si ahora siguen algunas sugestiones para su empleo en el caso
particular, ello es debido a que la descripción actual de la misma recibe nueva
luz, desde las necesidades de la práctica y puede ser completada siguiendo
otras muchas direcciones.
Además, nos mantenemos en la tarea que le fue impuesta al Servicio bioló-
gico-criminal en Alemania por la Orden de 30 de noviembre de 1937 en cada
caso particular1. Esta misión consiste no solamente en una investigación de
los presos penales y en la adquisición de todos los informes biológico-crimi-
nales importantes, sino que culmina en un “examen” conjunto de la persona2.
Correspondiente al “método ocial para el cumplimiento de los actos de in-
vestigación biológico-criminales” se ha extendido esta calicación según seis
direcciones que abarcan los siguientes puntos:
1. Valoración de la constitución general somática; hay que designar, además,
los tipos constitucionales de kretscHMer y la pertenencia racial, indicar las
enfermedades y malformaciones del examinando, así como, por ejemplo, en-
fermedades vencidas que hayan inuido su estado actual. Respecto a estas
enfermedades transmitimos a lo dicho en el capítulo XV.
2. Valoración de la constitución general psíquica; se esbozará por un psiquiatra
y una tipicación caracterológica, según kretscHMer.
3. Valoración biológico-hereditaria.—Según la instrucción debe ser estudiado
solamente si el examinando tiene una enfermedad hereditaria o está conside-
rablemente tarado. Los tres análisis hasta ahora citados son de naturaleza an-
tropométrica, médica y psicológica; a ellos puede ser sometido igualmente el
1 Impresa en Monatsschrift, 29, S. 65 ff.
2 neureiter, Monatsschr. 29, S. 79 ff.
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Franz ExnEr
no delincuente como el delincuente. No son de contenido biológico-criminal
especíco. A estos sigue:
4. Valoración social.—Aquí el examinando debe ser designado como “an-
tisocial (enemigo de la sociedad)”, como “asocial (parásito)”, como “en
relación social discreta” o “temporalmente social valioso”. Conforme la
instrucción, esta reseña debe hacerse basándose en la dirección vital se-
guida hasta ahora por el examinado en libertad. Remitimos aquí a la
anotación de la página 000. En el centro del problema biológico-criminal
nos encontramos con estas dos últimas tareas: debe darse.
5. Una calicación biológico-criminal, y
6. Una prognosis social.—Únicamente de estos dos puntos se ocupa el pre-
sente capítulo y el siguiente.
La calicación biológico-criminal se ha hecho ateniéndose a la instrucción
citada, siguiendo dos direcciones. El examinando hay que calicarlo como
delincuente ocasional, afectivo o de estado. Además hemos de denominarle resu-
midamente “según el grupo de delito en que se desenvuelve predominante-
mente su criminalidad” (ladrón, estafador, encubridor, delincuente contra la
moral, homicida, asesino, incendiario, calumniador, etc.). En el último caso se
trata de tipos sociológico-criminales de la forma dicha anteriormente (págs. 344
y sigs.), y por cierto, de “tipos de actividad”3. La ordenación en estos tipos de
actividad es posible, sin gran dicultad, teniendo a la vista la lista penal y las
experiencias del último procedimiento penal. Por lo demás, se ha de recordar
aquí los ya citados con anterioridad, tipos puros, tipos mixtos y tipos de transfor-
mación (págs. 345 y sgs.). Mayor dicultad ofrece la calicación biológico-cri-
minal en el grupo del delincuente ocasional, afectivo y de estado. Los conceptos
delincuentes de ocasión y de estado hay que entenderlos en el sentido en que
también este libro ha intentado concebirlo y aclararlo (página 325; según él
habrá de preguntarse el examinador si los actos del examinando están con-
dicionados principalmente por el mundo circundante o por el mundo inter-
no del mismo. Inmediatamente mencionaremos las líneas directrices para la
contestación de esta cuestión. Estos dos tipos basados en el mismo plano se
comparan con el tercer tipo, “el delincuente afectivo”. Esto no es feliz; este
tipo cae dentro de otro modo de consideración. Es un “tipo psicológico-cri-
minal” (pág. 348). Mientras que en los otros dos tipos la personalidad es la
base de la clasicación, en este es decisivo el fundamental motivo psicológico
de su acción. La deciencia de esta clasicación en tres tipos es clara con solo
reexionar que el delincuente afectivo, a su vez, es en parte delincuente de
ocasión, y en parte, delincuente de estado. Delincuente de ocasión, por ejem-
plo, cuando el autor se deja arrastrar a un delito pasional por una excitación
especial; delincuente de estado cuando, por ejemplo, es un bebedor habitual
que constantemente coge el cuchillo en el restaurante. En efecto, se encuen-
tran muchos delincuentes afectivos en reclusión de seguridad, es decir, son
3 En cuanto a su contenido, clasicamos el tipo del delincuente contra la moral: violador,
homosexual, exhibicionistas, impúdico con los niños, incluso, si se entiende el delincuente
contra la moral en el sentido del Código penal, pertenecen también aquí el alcahuete y el
ruán que psicológicamente caen en un plano completamente distinto. Sería de exigir una
clasicación más estricta de la personalidad.
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