Los principios de la justicia socialista
| Autor | Vladimir Terebílov |
| Cargo del Autor | Profesor asociado de la Facultad de Derecho en la Universidad Estatal de Moscú |
| Páginas | 35-64 |
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EL SISTEMA JUDICIAL EN LA URSS
CAPÍTULO II
LOS PRINCIPIOS DE LA JUSTICIA SOCIALISTA
1. Desarrollo de los principios de la justicia socialista
Como queda dicho, el Estado socialista necesitaba un nuevo sistema de
Justicia, nuevo no sólo de forma, sino, principalmente, nuevo por sus fines,
sus tareas y su contenido. Hubo de empezarse a crearlo con la aprobación de
las leyes correspondientes. Mas en un plazo corto, que transcurría en medio
de los acontecimientos revolucionarios, era imposible crearlo. Justamente por
esto fue preciso utilizar temporalmente las normas de las viejas leyes, siempre
que no estuvieran en pugna con la conciencia revolucionaria y el criterio de
Justicia revolucionaria.
Esta tarea resultaba más compleja aún porque hacían falta no simple-
mente nuevas leyes, sino leyes que estuviesen basadas desde el mismo co-
mienzo de la época soviética, desde los primeros días de la revolución, en los
nuevos principios socialistas.
Tales principios, en su expresión inicial, ya habían sido formulados en el
primer programa del Partido Obrero Socialdemócrata de Rusia, aprobado en
1903, y desarrollados en las obras de Lenin sobre el Estado y la revolución.
Así pues, en el momento de iniciarse la formación del Poder soviético existía
la posibilidad real de elaborar, apoyándose en esa herencia teórica, aunque
sólo fuera las disposiciones legislativas más necesarias, basadas ya en los
nuevos principios socialistas.
Inmediatamente después de la revolución, estos principios de la Justicia
socialista se vieron plasmados en los primeros decretos del Poder soviético,
como, por ejemplo, en el Decreto N° 1 sobre los tribunales y los sucesivos
decretos referentes a ellos promulgados en 1917 y 1918.
¿Cuáles eran los principios sobre los que se erigió la Justicia socialista?
Contestando en la forma más general a esta pregunta se deben señalar
ante todo la electividad de los jueces, su independencia y su subordinación
sólo a la ley, los tribunales accesibles a la población y algunas otras condi-
ciones que prefiguraban la naturaleza socialista de los nuevos tribunales
soviéticos.
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VLADIMIR TEREBÍLOV
Por supuesto, no hay que considerar esto como si, de golpe, ya en 1917,
el naciente Estado soviético hubiese logrado formular y llevar a la práctica
definitiva y absolutamente todos los principios de la Justicia socialista. No.
A esto el Estado soviético no llegó de una vez. Se requirieron tiempo y un
trabajo muy perseverante para que los principios de la Justicia socialista
encontraran pleno y exacto reflejo en la ley y en la práctica. En los primeros
años siguientes a la revolución sólo se dieron los primeros pasos, aunque
muy importantes: se trazaron algunos de los principios básicos de la Justi-
cia socialista y se subrayaron el gran significado y la necesidad de perfec-
cionar sus fundamentos.
El Programa del Partido Comunista de la Unión Soviética, aprobado
por el XXII Congreso de PCUS, constituyó un nuevo jalón en la vía de de-
sarrollo y perfección de los fundamentos de la Justicia socialista. En él se
dice, entre otras cosas: «La administración de justicia se ejerce en la URSS
de pleno acuerdo con la ley. Se basa en principios auténticamente democrá-
ticos: electividad de los jueces y jurados populares y su obligación de ren-
dir cuenta del cumplimiento de sus funciones, el derecho de revocarlos en
cualquier momento, la publicidad del proceso judicial y la participación en
los juicios de acusadores y defensores designados por las organizaciones
sociales, observando rigurosamente el tribunal y los organismos de instruc-
ción e investigación la legalidad y todas las normas procesales. Los prin-
cipios democráticos de la administración de justicia se desarrollarán y per-
feccionarán»1.
Del contenido del Programa del PCUS se puede sacar la siguiente con-
clusión: rasgo indeleble de la Justicia soviética son el desarrollo y la amplia-
ción constantes de sus principios democráticos, con la particularidad de que
lo característico del desarrollo de estos principios estriba en el continuo robus-
tecimiento de la protección de los derechos y de los intereses legítimos de los
ciudadanos y la creciente participación de las organizaciones sociales en la
administración de justicia.
En diciembre de 1958, el Soviet Supremo de la URSS aprobó los nuevos
Fundamentos de la legislación sobre el sistema judicial de la Unión de RSS y
de las repúblicas federadas. Esto significó otro paso adelante en el perfeccio-
namiento de la Justicia. Por entonces ya habían madurado las condiciones
para transmitir a las organizaciones sociales algunas funciones de los órga-
nos estatales y existía ya la posibilidad de confiar a organismos sociales cier-
tas obligaciones relativas al mantenimiento del orden público. En vista de ello,
en la legislación de la URSS y en la de las repúblicas fueron introducidas
algunas adiciones y enmiendas. Por ejemplo, se dictó el precepto en virtud del
cual las personas culpables por primera vez de los delitos menos peligrosos
podían ser eximidas de pena y puestas bajo caución de las organizaciones
1Programa del Partido Comunista de la Unión Soviética, ed. en ruso. Moscú, 1974, pág. 106.
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