Capítulo primero: Empresa familiar e interés familiar
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CAPÍTULO PRIMERO
EMPRESA FAMILIAR E INTERÉS FAMILIAR
I. LA EMPRESA FAMILIAR
La empresa es una de las instituciones más extendidas e in-
uyentes de nuestra sociedad, en cuyo marco se adoptan una
serie de decisiones relevantes para el devenir social. Estas
conforman eslabones en una cadena de factores que deter-
minan, entre otras cosas, el rango de productos disponibles
para los consumidores, el ingreso nacional, el grado de segu-
ridad económica, la tasa de progreso económico y la distribu-
ción de los ingresos. Sus decisiones inuencian también, y de
manera signicativa, el carácter de las relaciones humanas,
la calidad de vida de las personas e, incluso, las estructuras
de poder vigentes en cada sociedad1.
Debido a ese signicativo aporte a la economía, al empleo,
a la innovación, al crecimiento y, en n, a la prosperidad y
bienestar de las naciones, su comprensión teórica se ha vuel-
to trascendental2. Aún más, si se considera que la empresa es
1 rothmann (1995) p. 1. En palabras de Micklethwait y Wooldridge: “Hoy en día,
la inuencia de esta inquietante organización es todavía más profunda. Hegel
predijo que la unidad básica de la sociedad moderna sería el estado. Marx,
que sería la comuna. Lenin y Hitler, que sería el partido político. Antes de eso,
una serie de santos y sabios auguraban lo mismo para la iglesia parroquial, la
nca feudal y la monarquía (…) todos ellos resultaron estar en lo incorrecto.
La organización más importante del mundo es la empresa”, micklethwait y
wooldridge (2003) pp. xiv-xv (traducción libre).
2 No obstante su importancia, el estudio teórico de la empresa no ha recibido
tanta atención como podría esperarse, ni aun siquiera desde la teoría econó-
mica. Bylund expresa que “la teoría de la empresa ha sido un área de estudio
Editorial El Jurista
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la creadora natural de riqueza en la sociedad y que una gran
mayoría de ellas son o han sido familiares, es posible armar
que las empresas familiares constituyen la columna vertebral
económica de la sociedad3, tanto en economías emergentes
como en las más desarrolladas, y participan en los más varia-
dos sectores económicos.
La versatilidad y preponderancia de estas empresas era
apreciable incluso en la época preindustrial, bajo la gura del
pequeño taller artesanal o compañías tan sosticadas como el
Banco Medici4. Hoy en día, la preeminencia de estas empre-
sas a nivel global es fácil de advertir si se atiende a grandes
grupos empresariales, tales como Walmart, Volkswagen, Ford
Motor, BMW, Samsung, Nike, L’Oreal, Twenty-First Century
Fox, entre tantos otros, todos los cuales comparten la carac-
terística de ser holdings familiares. A nivel nacional, podemos
citar el caso de AntarChile y Empresas Copec (familia Angeli-
ni), Cencosud (familia Paulmann), S.A.C.I. Falabella (familia
Solari), Quiñenco (familia Luksic) y CMPC (familia Matte), por
mencionar algunos.
En Chile han tenido una fuerte inuencia aquellas familias
que, en diferentes épocas de nuestra historia, han inmigrado
al país volcando su iniciativa empresarial, creando industrias
y comercios que, más tarde, pasaron a sus descendencias.
Entre ellas se encuentran, especialmente, las familias espa-
abandonada por la economía tradicional. A pesar de que Ronald Coase puso
el tema en discusión en 1937, este no estuvo en los programas de investigaci-
ón sino hasta la década de 1970. Incluso ahora que tanto Coase como Oliver
Williamson –el fundador del análisis de la empresa basado en los costos de
transacción– han recibido el Premio Nobel en economía, el área permanece en
la perisferia del análisis económico”: bylUnd (2011) pp. 188-215 (traducción
libre).
3 de arqUer (1979) p. 315.
4 colli (2003) p. 8.
Editorial El Jurista
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Pactos sobre transferencia de acciones en la emPresa familiar
ñolas e italianas que migraron a nuestro país durante la se-
gunda mitad del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, las
que fueron prolícas en la creación de empresas, así como los
inmigrantes árabes e israelitas después de la segunda guerra
mundial5. Muchas de estas empresas siguen existiendo en la
actualidad en formas de grandes grupos empresariales, los
cuales adquieren una importancia crucial en mercados espe-
cialmente concentrados como el chileno.
En la actualidad, la empresa familiar es una realidad impo-
nente en Chile. Un estudio liderado por la Asociación de Em-
presas Familiares (AEF)6 determinó que, del total de empresas
chilenas, el 41,22% corresponde a empresas familiares, las
cuales aportan el 41% del empleo nacional. La principal parti-
cipación de estas empresas se da en el segmento de empresas
medianas, ya que el 52,3% de este tramo (con ventas anuales
sobre UF 25 mil y bajo UF 100 mil) son familiares, seguido por
el segmento de pequeñas empresas (48,4%) y, nalmente, por
el segmento de grandes empresas (39,8%), entendiéndose por
tales aquellas con ventas anuales sobre UF 100 mil.
Los sectores con mayor presencia de empresas familiares
son comercio, industria manufacturera y el rubro agrícola,
mientras que los sectores que más aportan en materia de in-
gresos totales en las empresas familiares son comercio, in-
dustria manufacturera, actividades nancieras y de seguros,
estas últimas impulsadas principalmente por el rol de las de-
nominadas family ofces7.
5 Véase a este respecto: Jiménez (1997) p. 1.
6 La Asociación de Empresas Familiares (AEF) es una organización chilena sin
nes que lucro que reune a más de 80 familias empresarias de nuestro país.
Dentro de sus asociados guran las familias Luksic (Quiñenco), Solari (Fala-
bella), Von Appen (Ultramar), Saieh (CorpGroup y SMU), Said (Grupo Said y
Parque Arauco), Yarur (BCI), entre muchas otras.
7 asociación de emPresas familiares de chile (2019).
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