Algunos antecedentes de la crisis del derecho político
| Autor | Adolfo Posada |
| Páginas | 11-14 |
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LATRANSFORMACIÓNDEL E STADO
I
ALGUNOS ANTECEDENTES
DE LA CRISIS DEL DERECHO POLÍTICO
HACE ya algún tiempo, con ocasión de comentar el interesante libro del ame-
ricano Mr. Wilson sobre
El Estado
1
,
recogíamos algunas de las indicaciones, a nues-
tro juicio indiscutibles, de la crisis aguda por que, en los momentos que corren,
atraviesan el
hecho
y la
idea
del Estado. Tratábase, y trátase, de una crisis general,
apreciable en el proceso universal de los principios políticos y en la evolución
histórica de los Estados, y a la vez de crisis que podríamos llamar nacionales, en el
sentido de que la primera tiene manifestaciones parciales de distinto carácter e
intensidad en los diferentes pueblos. Ya entonces, al apreciar la relación del libro
de W. Wilson con las doctrinas políticas americanas —yanquis más bien —, señalá-
bamos la situación crítica de las ideas y de las creencias políticas en los Estados
Unidos, al contacto con las doctrinas europeas, y bajo el influjo de las grandes
transformaciones interiores. Seguíamos, como guía inspirador, el excelente libro de
Merriam,
A history of American political theories
1
.
Nota este sabio escritor cómo se
modifican, en los Estados Unidos, los conceptos que venían constituyendo el fondo
sustancial de la política teórica y práctica americana. «En la última mitad del siglo
XIX — dice — ha aparecido en los Estados Unidos un grupo de teóricos políticos,
diferentes de los primitivos pensadores en el respecto del método y con relación a
muchas importantes doctrinas de la ciencia política. El nuevo método era más siste-
mático y más científico que el que le había precedido, y los resultados conseguidos
mostraban una acentuada reacción frente a la filosofía individualista de los prime-
ros años del siglo»2.
El fenómeno de la crisis de las doctrinas y de las aplicaciones políticas, que
determina la nueva orientación del Derecho político americano, es un ejemplo inte-
resantísimo de cómo las crisis se producen en el proceso evolutivo de un Estado.
En América habían florecido con una extraordinaria lozanía las ideas del siglo
XVII, inglés, y del siglo XVIII, francés. En su aislamiento relativo, sin una tradición
llena de fermentos como en Europa, esas ideas, que no constituyeron un verdadero
cuerpo de doctrina construida, pudieron obrar como ideas-fuerzas inspiradoras, en
relación inmediata con los problemas prácticos que han constituido la trama dra-
mática de la historia de la Unión americana. «En general, dice Merriam, la teoría
1
Estudio preliminar
de la tra ducc ión espa ñol d e
El Estado,
de W. Wilson, publicado aparte bajo el titulo
Un libre sobre el Estado
(Madrid, 1904).
1Un vol. New-York, 1903.
2Ob. cit., pág. 305.
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