Corte de Apelaciones de Santiago, 17 de octubre de 2002. Campos Montecinos, Patricio Recurso de amparo
| Autor | Carlos Künsemüller Loebenfelder |
| Páginas | 143-144 |
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Conociendo del recurso interpuesto,
LA CORTE:
Vistos y teniendo presente:
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Que* del estudio del Expediente 120.133, seguido ante el Tercer Juzgado del Crimen de Santiago, y tenido a la vista por esta Corte, consta a fs. 383, declaración del procesado Campos Montecinos, quien expone que llegó a reunir, según informaciones que le fueron suministradas, 55 nombres de personas desaparecidas.
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Que a fs. 385, rola oficio dirigido por el encausado, al Sr. Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea de Chile, con fecha septiembre de 2002, en el que se lee lo siguiente: “Toda la documentación que se generó en este procedimiento, la destruí personalmente, anotando en un documento personal sólo los nombres de las 23 personas que en definitiva le informaron gracias a lo cual he podido reconstituir dicha lista en el documento anexo que acompaño”;
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Que, dicha aseveración es confirmada, posteriormente, por Campos Montecinos, en su declaración que rola a fs. 392, en la que señala: “Recibí los 23 nombres que finalmente entregaría al Ejército, para que éste iniciara el trabajo de hacer la lista final”;
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Que, no obstante lo afirmado en su oficio dirigido al Comandante el Jefe de la Fuerza Aérea de Chile, y confirmado posteriormente en su declaración de fs. 392, Campos Montecinos, en una nueva declaración personal prestada con fecha 2 de octubre del 2002, que rola a fs. 59 del Cuaderno secreto, aclara que hubo un error cuando manifestó el número de 23 personas desaparecidas, ya que al revisar el informe final de las personas desaparecidas se percató que faltaban cinco personas. La razón dice, es que en el anónimo en que estaban los nombres de esas personas sólo venía un año al lado del nombre, por lo que no supo dónde ponerlo y estimó que no era útil ni conducente colocarlos, por lo que no los entregó en la lista dada al Ejército;
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Que dicha afirmación del procesado de haber incurrido en un error, carece de toda verosimilitud, al tenor de lo expuesto por el mismo encausado de que él había anotado en un documento personal sólo los nombres de las 23 personas, esto es, de aquellos que él mismo consideró, luego de haberlos examinado, que reunían la información necesaria como para entregar su nómina al Ejército e informarlos luego en el Oficio dirigido a su superior jerárquico, el Comandante en Jefe de la Fuerza Aérea de Chile; además, dicha declaración la presta Campos Montecinos, luego que Carlos Molina Jonson, General de División del Ejército...
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