Las razones de la 'dulce' victoria de Cameron para gobernar con mayoría absoluta
"Podemos hacer del Reino Unido un lugar en el que el bienestar pueda llegar a todos los que quieran trabajar", comentó el Premier, que además de agradecer a los votantes de Witney, su distrito, subrayó que el buen resultado de los conservadores a nivel nacional fue fruto de una "campaña positiva sobre la protección de nuestra economía".
Sin embargo, la alta tasa de participación en estas elecciones de un 66,1% (la mayor en 18 años) contenía una mala noticia para la oposición. El Partido Laborista y su líder, Ed Miliband -que llevó a la formación lejos de la estrategia más centrista que persiguió a finales de 1990 y principios de 2000 en virtud de Tony Blair-, obtuvo su peor resultado en 40 años, con 26 escaños menos de los que ocupaban hasta ahora en la Cámara Baja del Parlamento.
Tras saber los resultados oficiales, Miliband renunció y dejó abierta la puerta para un nuevo debate sobre la dirección del partido. "Reino Unido necesita un Partido Laborista fuerte. Reino Unido necesita un Partido Laborista que pueda ser reconstruido después de esta derrota para que podamos tener un gobierno que defienda otra vez a la clase trabajadora", afirmó.
Los comicios dejan un nuevo mapa político en Gran Bretaña y otros damnificados, como el líder del Partido Liberal Demócrata, Nick Clegg, y el jefe del eurófobo Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), Nigel Farage. Ambos presentaron su renuncia (ver relacionado).
Otra sorpresa fue la que entregó el Partido Nacional Escocés, que obtuvo la mayoría de los escaños de su región, quitándoles uno de los bastiones históricos a los laboristas.
Es que los resultados desafiaron a todas las encuestas de opinión pre-electorales que sugerían una reñida carrera entre los conservadores y los laboristas. Un escenario impensando hace algunos días llega ahora al Reino Unido, Cameron y su partido se mantienen en el 10 de Downing Street para un segundo mandato, con suficientes escaños en la Cámara de los Comunes para asegurar su agenda sin tener que depender del apoyo de formaciones minoritarias, aunque limitado al margen de maniobra que le permita su propio partido.
El núcleo duro
Luego de visitar a la reina Isabel II en Buckingham y subrayar su compromiso con la unidad territorial del Reino Unido, Cameron reiteró su intención de cumplir con "todas" las promesas de su programa. La más polémica, la celebración de un referendo sobre la permanencia en la Unión Europea (UE) antes del final de 2017. Y las otras...
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