La propiedad (Morelly y Mably)
| Autor | Jacob L. Talmon |
| Cargo del Autor | Profesor en la Universidad Hebrea de Jerusalén |
| Páginas | 81-95 |
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CAPÍTULO IV
LA PROPIEDAD (MORELLY Y MABLY)
A) PREMISAS Y CONCLUSIONES – LA DISCREPANCIA1
La idea del modelo social-natural, del modo que ha sido analizado en las pá-
ginasanteriores,puedeparecerinsuciente.Esunpostuladoabstracto,unaconcha
1 Sobre las disc usiones acerca del elemento socialist a en el siglo XVIII, véase la nota
a la sección c),cap.I. Lareti radaestá ejemplicadade laforma másll amativapor
Sieyè s (véase nota a la parte II, cap. V, sección a), y Condorcet, pág. 314, ambos pen-
sadores escribieron b ajo el impacto de los acontecimientos, no teori zaban en el va-
cío. Muy a comienzos del siglo xviii, Rec ueil de Passerau escribía: Le gouvernem ent
démocratique est celui où toute l’autorité est au peuple, et où les hommes sont égaux en no-
blesse, en puissance, en rich esses; pour tel effet il faut que tous, les biens appart iennent à
la République qui les dispensera en b onne mère selon les besoins. Si on laisse entrer dans
la société les paroles meum et tuum, la ruine est inevitable. On ne doit jamais tolé rer ces
expressions: mon bien, etc. Hen ri Lion, Les idées d’Holbach, Annales Histor iques de la Ré-
volution Franç, 1924, vol. I, pág. 363 y sig. Espinas entendió bien las potenc ialidades
socialist as de la idea individualista del derec ho natural, pág. 115 y siguientes.
El Estado como instr umento de explotación —Helvetius, Lettre à Montesquieu, Œu-
vres, vol. V, pág. 215; De, l’Homme, sección VI, cap. V, Œuvres, IV, pág. 21 y sigs.; cap.
VII, pág. 30 y sig.; caps. VIII-X, págs. 33-43; sección VIII, cap. III, Œuvres, IV, pág.
137; Morelly, pág. 37. “Todos estos males”; Helvetius, Œuvre s, IV, pág. 127 (ed. 1781,
Londres); Lichtenberger, Le Soc., pág. 264.
El amor al dinero incompat ible con el amor a la virtud —Helvetius, De l’Homme,
sección VI, caps. XII-XV, Œuvres, IV, págs. 4454; cap. XVI, pág. 55 y sigs.; Diderot, Lé-
gislateur, Encyclopédie, 1782, vol. XIX, pág. 755 y sigs. Rousseau, Discours sur l’inégalité,
Pt. II, Vaughan, vol. I, págs. 169, 180 y sigs.; y la famosa nota I, págs. 202-7; Helvetius,
De l’Homme, Œuvres, Londres, 1781, pág. 127 (citada por Lichtenberger, Le Socialisme
au XVIIIème siècle, pág. 264); Espina s, 95. La comunidad como dueña, de todos los bie-
nes —Rousseau, C. S., lib. I, cap. IX; Emile, lib. V, Vaughan, II, pág. 152; C. S., primera
versión, lib. I cap. V, Vaughan, I, pág. 466 y sig,; Corse, Vaughan, II, pág. 337 y sigs.,
344 y siguientes.
La propiedad sagrada —Rousseau, Économie politique, Vaughan, I, págs. 259 y sigs.,
265, 273; Helvetius, De l’Homme, sección X, cap. VII, Œuvres, vol. IV, pág. 357.
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