¿Llamado a la reflexión o al enfrentamiento?
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¿LLAMADO A LA REFLEXIÓN O
AL ENFRENTAMIENTO?
“Desde el minuto cero fue crimen, felonía y vergüenza. No es
separable el golpe de Estado de las violaciones a derechos huma-
nos. Van totalmente de la mano y por eso yo lamento que hoy
día haya quienes públicamente estén reivindicando acciones
como las que se vivieron hace 50 años”. Esta frase fue pronun-
ciada por el Presidente Gabriel Boric en el acto de homenaje al
exlíder sindical DC, Rodolfo Seguel, a mediados de agosto.
Con ello, es posible advertir que, a medida que se acerca el 11
de septiembre, el mandatario va endureciendo el discurso en
torno a la conmemoración de los 50 años del golpe. Atrás queda
la idea de realizar una conmemoración en tono reflexivo o con
mirada de futuro, que se había insinuado los primeros meses
del año y que incluso llevó al Presidente a enfrentarse con los
sectores más duros de la izquierda con frases como, “desde la
izquierda tenemos que ser capaces de analizar la unidad popular
con mucho mayor detalle y no solamente desde una perspectiva
mítica”.
Hoy, en consonancia con el tono que impera, los discursos del
mandatario están enfocados en hablarle a su propio sector,
al 30% que aprueba su gestión sin importar los escándalos de
corrupción del Gobierno, el aumento de la delincuencia, de la
inflación y otras tantas situaciones. Esto, en un claro intento de
reconquistar al sector de extrema izquierda y a las agrupaciones
de derechos humanos escépticas del proceso de conmemora-
ción que se lleva adelante.
Pero, ¿qué tan relevante es esta conmemoración de los 50 años
del Golpe para los chilenos? La encuesta Criteria realizada entre
el 3 y el 8 de agosto, es decir, a casi un mes del 11 de septiembre,
muestra la percepción de los ciudadanos frente a esto. “Pensan-
do en la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado que
se cumplen en septiembre de este año, ¿cuáles de las siguientes
frases se parecen más a lo que tú piensas”, se pregunta en el
estudio. Los resultados fueron los siguientes: el 56% responde
que la conmemoración “nos divide como país”, 40 puntos más
de quienes piensan que “nos une como país”. El 48% piensa que
“es irrelevante para las personas como yo”. El 25%, vale decir,
23 puntos menos, cree que sí importa. El 47% estima que “nos
deja pegados en el pasado, afectando la convivencia futura entre
chilenos”, versus el 31% que sostiene que “es un aprendizaje de
cara a la convivencia futura entre chilenos”.
Como vemos, no hay consenso respecto a la trascendencia de
esta conmemoración, hoy, 50 años después, ni mucho menos,
respecto al tono que debiera tener. Pese a ello, el mandatario ha
cambiado nuevamente el discurso, lamentablemente, dando pie
a un clima de enfrentamiento y polarización política y social, en
detrimento de la reflexión y el entendimiento. ¿Cambiará nueva-
mente el tono?
GIMNASIA POLÍTICA
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