Capítulo I: Introducción al Cloud Computing
| Autor | Rodrigo Campos |
| Páginas | 256-276 |
RODRIGO CAMPOS
Editorial El Jurista
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Luego, en una segunda etapa, se procederá a un estudio de
nuestra legislación tendiente a determinar qué aspectos legales de-
ben ser cubiertos para la utilización de esta tecnología, analizando
nuestra normativa vigente vinculada con el cloud computing.
Posteriormente, en una tercera y última etapa, se realizará un
análisis de la forma en como la Administración puede hacerse de
estos servicios de CN, ahondando especícamente en los aspectos
contractuales que los órganos del Estado deben tener en cuenta al
momento de contratar y negociar esta clase de servicios.
Se nalizará con algunas conclusiones propias al respecto, las
que darán cuenta de una remisión a lo mencionado a lo largo de la
memoria.
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN AL CLOUD COMPUTING
En este primer capítulo, efectuaremos un examen individualizado
del origen, concepto, caracteres y las diferentes modalidades que
existen en materia de los servicios relativos a la computación en la
nube, así como también, estableceremos la diferenciación existente
entre el contrato de hosting y el de cloud computing, lo cual nos per-
mitirá adentrarnos al contrato de CN desde la perspectiva de sus
aspectos jurídicos generales.
1. QUÉ SE ENTIENDE POR CLOUD. ORIGEN Y CONCEPTO
La nube o computación en la nube (diferentes términos para denir
el cloud computing), es uno de los términos tecnológicos (buzzwords)
que más ha estado en boga este último tiempo tanto en empresas,
organizaciones y entidades de carácter público en general. Esto se
debe a que es visto como una solución a los problemas derivados de
lo que se conoce como la “infraestructura tecnológica”.
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DERECHO INFORMÁTICO
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En cuanto al origen de “la nube”, debemos remontarnos a la
década de los sesenta, en particular al año 1962, en donde Lickli-
der de la empresa Bolt, Beranek and Newman (BBN), formuló un
concepto de una red de computadoras susceptible de poder llegar
a comunicar usuarios desde diversos ordenadores personales425.
Douglas Parkhill, más de tres décadas después, en 1996, se re-
rió a muchos de los caracteres inherentes a la computación en la
nube. No obstante, a juicio de otros investigadores426, los verdade-
ros orígenes de la computación en la nube se sitúan en la década
de los cincuenta del siglo XX con Herb Grosch.
Realmente fue a nales de los años noventa, precisamente en
1999, cuando “Salesforce.com” introdujo el concepto de entrega de
aplicaciones empresariales a través de un sencillísimo sitio web.
Luego, solo tres años después, la popular empresa Amazon puso
en práctica Amazon Web Service. Cuatro años más tarde, o sea,
en 2006, llegó Google Docs427 que, como es conocido, popularizó el
cloud computing. Naturalmente, además de los ejemplos enuncia-
dos, existen otros muchos, como Dropbox, Google Drive, iCloud de
Apple y OneDrive de Microsoft.
Pero, ¿qué se entiende conceptualmente como cloud computing?
En la actualidad, no existe una denición estándar aceptada uni-
versalmente; sin embargo, existen organismos internacionales, que
tienen como objetivo la homogenización de las TI y en particular
del cloud computing. Uno de los organismos más reputados en esta
materia es el National Institute of Standars and Technology (NIST) y
su laboratorio de TI, el cual dene computación en la nube como:
425 STELLA RODRÍGUEZ, Gladys, Computación en la nube: algunas consid-
eraciones técnico-jurídicas, en Revista Lex de la facultad de Derecho y Ciencias
Políticas de la Universidad de Alas Peruanas, 17 (2019) 23, p. 150.
426 LÓPEZ JIMÉNEZ, David, La computación en la nube o cloud computing ex-
aminada desde el ordenamiento jurídico español, en Revista de Derecho de la
Ponticia Universidad Católica de Valparaíso, 24 (2013) 20, p. 693.
427 El servicio de “Google Documentos y Hojas de cálculo”, también denominado
“Google Docs & Spreadsheets”, constituye un programa gratuito basado en
“web” para crear documentos en línea con la posibilidad de colaborar en gru-
po. Ahora bien, debemos poner de relieve que Google Docs recientemente ha
sido reemplazado por Google Drive. Cada usuario tiene, de manera gratuita,
cinco “gigabytes” de memoria con la nalidad de almacenar sus archivos.
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