Vivir amenazado por los narcos
"Es la imagen del Padre Hurtado . Me la regaló una vecina para que me cuide y proteja", explica Gustavo Toro, de 40 años, sobre la pulsera roja que lleva en su muñeca izquierda. Durante la conversación, el actual concejal (DC) de San Ramón observa el patio interior de su edificio. Está sentado en el salón de eventos. Luce calmado, sin embargo, en algunos momentos, su actitud cambia a un estado de alerta, como si vigilara todo lo que ocurre a su alrededor.Son las 11 de la mañana de un lunes y afuera del edificio, unos tibios rayos de sol mitigan las bajas temperaturas. También se ven algunas familias pasear en bicicleta y, cada cierto rato, aparece una patrulla de Carabineros que ronda por el sector.Desde hace un tiempo, Gustavo Toro dejó su casa en la comuna de San Ramón para mudarse a ese edificio, también en el sector sur de Santiago, junto a su esposa y tres hijos. Por su seguridad, su equipo pide no entregar mayores detalles de su ubicación. "Nos cambiamos por un tema de resguardo, no por opción propia", explica.En mayo pasado, tras las elecciones para la alcaldía de San Ramón, Gustavo Toro obtuvo el segundo lugar contra el histórico edil Miguel Ángel Aguilera, quien buscaba su tercer periodo. Sin embargo, hace dos semanas, el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) determinó repetir las votaciones en 65 mesas de la comuna, luego de un requerimiento presentado por cuatro candidatos a alcalde -encabezados por Gustavo Toro- y 11 al concejo municipal, en el que acusaban graves irregularidades del proceso: urnas sin sellos, corte de suministro eléctrico al momento del conteo de votos y el cierre de las puertas para impedir el ingreso de apoderados y de la prensa a los locales, según la denuncia de los mismos candidatos.Gustavo Toro obtuvo el 21,83 por ciento de los votos y Miguel Ángel Aguilera, un 23,98 por ciento. Pero la lucha entre los políticos comenzó en 2016, cuando Toro asumió como concejal de la comuna y denunció una serie de hechos contra Aguilera: eventuales delitos de enriquecimiento ilícito, cohecho y lavado de dinero; los que hoy están siendo investigados por la Fiscalía Sur. También denunció el financiamiento de la campaña de Aguilera, con aportes de un conocido narcotraficante del sector, siendo uno de los primeros casos de "narcopolítica" en el país.Desde esa época, asegura, su vida y la de su familia cambió para siempre, relata Gustavo Toro. "Hemos vivido bajo un constante hostigamiento por parte del equipo de Miguel Ángel Aguilera y los narcos de la comuna, amenazas de todo tipo, desde publicar información de mis hijos hasta balazos. Pero, desde que me postulé a la alcaldía, la situación empeoró".Para las elecciones primarias de Gobernador en la región Metropolitana, en noviembre del año pasado, Gustavo Toro dice haber recibido la primera amenaza. Asegura que, cuando asistió a su centro de votación, tres apoderados de mesa lo siguieron. "Antes de entrar a la cámara a votar, uno de ellos se me acercó y me dijo: 'Andamos cargados y no...
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