'Estamos viviendo la reconquista de las tierras rusas'
En Rusia cualquiera reconoce su cara, aunque las opiniones sobre él varían mucho. Limónov, cuyo apellido real es Savenko, a sus 71 años y con pelo canoso, parece hoy un hipster, y hace recordar su estilo punk de los 70.
Para quienes lo conocen hace décadas es un personaje popular del underground moscovita, famoso por ser un buen sastre de jeans en los tiempos soviéticos, cuando esa era la prenda más chic para los disidentes. En EE.UU., donde se mudó tras negarse a colaborar con el KGB en 1974, a Limónov se lo recuerda por sus artículos críticos del capitalismo en un periódico de inmigrantes rusos, mientras trabajaba como mayordomo para un millonario en Nueva York. Y en Francia, su siguiente destino en los 80, fue un escritor de moda.
Al volver a su patria, convertida en la Federación de Rusia, fundó el Partido Nacional Bolchevique en 1993 que luego fue prohibido por "ser una organización extremista". Después participó en las guerras yugoslavas (del lado serbio), escribió decenas de libros, fue juzgado y encarcelado en varias ocasiones. Hoy se autodenomina ideólogo de la oposición rusa y quiere que empiece una nueva Guerra Fría, dice desde Moscú a "El Mercurio".
-En Rusia lo conocen como escritor y político, mientras que para el resto del mundo, incluyendo América Latina, usted ante todo es un personaje del libro de Carrère. ¿No le molesta que lo perciban con los ojos de este periodista francés?
"El libro de Carrère es una casualidad, podría no haber sido publicado. Y por supuesto, él vio a Eduard Limónov con los ojos de un literato francés burgués. Nunca he dado mi opinión sobre su libro, me abstendré nuevamente. Sin embargo, no cabe duda que su libro ha aumentado mi influencia en el mundo, eso es positivo. Él, como pudo, me explicó para los extranjeros".
-¿Cómo piensa aprovechar esta popularidad que logró en Occidente? ¿Qué significa esto para usted?
"La verdad, no sé cómo puedo usar esta popularidad. Siento cierto tipo de alegría maliciosa de haber podido imponerme a ELLOS (las mayúsculas son del propio Limónov) tal como soy, sin haberme doblado según SUS estándares, según SU corrección política".
-Cuando en marzo pasado Rusia anexó Crimea, usted lo apoyó con mucho entusiasmo. ¿Opina lo mismo ahora?
"Tras la desintegración de la Unión Soviética, Ucrania se quedó con la herencia que le regaló Moscú. La república ucraniana llegó a tener muchas tierras que no eran suyas: una parte de Polonia, parte de Rumania, Hungría, Checoslovaquia. Así...
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