Viaje al interior de la Maquinaria de los G-90 - 8 de Agosto de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 579861254

Viaje al interior de la Maquinaria de los G-90

La frase es de un dirigente del PPD, sentado en un café del centro. "Si se hubieran podido tomar el partido, lo hubieran hecho", agrega. Después de todo, haciendo un cálculo conservador, otro dirigente estima que no son menos de 300 los que están trabajando como funcionarios públicos a lo largo de todo Chile.

Hace un año, algunos en el partido hablaban de ellos como una facción interna, junto con el "neolaguismo" y el "girardismo". Y aunque no tenían tanta fuerza, varios los miraban con preocupación.

Hoy, tras la caída del ex ministro Rodrigo Peñailillo, tras los informes para Giorgio Martelli y los pagos a través de boletas a Peñailillo y algunos de sus cercanos, y los llamados de la fiscalía a declarar por dineros de una supuesta "precampaña", el mismo dirigente señala: "Fue una sorpresa para muchos de nosotros la máquina de financiamiento que tenían".

Y que se hayan atrevido a hacerlo, dice, también sorprende.

Igual el hecho de que "en un partido tan extrovertido como es el PPD existiera un grupo así de cerrado. Y nosotros los mirábamos a huevo".

El grupo eran Rodrigo Peñailillo, Harold Correa, Flavio Candia, Juan Eduardo Faúndez, Gabriel Sepúlveda y Adolfo Galindo, entre otros, quienes asumieron en diversos puestos de gobierno, secundarios, pero claves, en jefaturas de gabinetes y otros cargos. Y varios con carrera en anteriores gobiernos: Correa, por ejemplo, fue dos veces jefe de gabinete de Sergio Bitar -en Educación y Obras Públicas-. También de Lagos Weber y de Carolina Tohá.

"Su norte, más que tener sentido de la política, era cómo llegar a la cima", dice hoy un PPD. Cercanos al G-90 refutan esta mirada. Dicen que nunca fueron cerrados, que operaban con lógica de ser parte de un partido, no de una secta.

Dirigentes como Sergio Bitar y Francisco Vidal son considerados los grandes padrinos de los G-90, aunque un dirigente cercano al grupo asevera: "Nuestra inspiración política no tiene que ver con un padrino político".

Bitar le quita dramatismo:

-Me llama la atención cómo a este grupo se le ha puesto una etiqueta, se le ha dado una organización que no ha tenido, y una proyección excesiva que no guarda ninguna relación con la realidad y, por lo tanto, se ha transformado en un pequeño ícono, que permite dispararle y criticarlo. Aquí se inventó un asunto que va más allá de lo que es, porque la verdad es que el poder que un grupo como este pueda tener, nace básicamente de que la Presidenta nombró a Peñailillo en enero de 2014 como ministro del Interior.

El origen

"Era invierno, llovía, él estaba en una oficina chiquitita y llena de goteras". Así recuerda Mario Gebaeur, hoy alcalde de Melipilla y socialista que antes fue PPD, la primera vez que vio a Rodrigo Peñailillo, en 1996, cuando él era presidente de la Juventud del PPD y el ex ministro, un joven presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad del Bío-Bío. "Era un muy buen dirigente", agrega.

En Santiago, Harold Correa, oriundo de Puerto Natales "con beca alimenticia y que venía bien de abajo", según un amigo de él, y que se identificaba con el socialismo, gana la secretaría general de derecho en la Universidad de Chile. Allí lo llaman para integrarse al PPD en 1997. Paralelamente, Juan Eduardo Faúndez había ganado la elección de presidente en sociología de la misma universidad y también llega al PPD. Carolina Cucumides ingresa al grupo desde la Federación de Estudiantes de la Usach.

Cuando Peñailillo egresó de ingeniería comercial, se vino a Santiago a hacer su práctica profesional. Desde el sur también habían llegado Candia, Riquelme y Ricardo Vásquez -jefe de administración y finanzas de Peñailillo en Interior-. Todos venían de la VIII Región y habían estudiado ingeniería civil en la Universidad del Bío-Bío. Riquelme conocía a Peñailillo de antes, cuando ambos estudiaban en el liceo A-49 de Coronel. Vásquez, Riquelme y Peñailillo vivían juntos, además, en un departamento en calle San Martín, en el centro.

Fue en la primaria de Ricardo Lagos contra el DC Andrés Zaldívar, por la candidatura presidencial de la Concertación, en mayo de 1998, cuando Peñailillo y Harold Correa se conocieron.

Ambos eran laguistas. Se hicieron inseparables. Un amigo de ambos dice que se "leen de memoria".

Francisco Vidal y Peñailillo se conocieron...

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