Vecinos de Ámbar claman justicia y piden que la familia Bustamante no regrese al barrio - 23 de Agosto de 2020 - El Mercurio - Noticias - VLEX 847394917

Vecinos de Ámbar claman justicia y piden que la familia Bustamante no regrese al barrio

Un perro de raza indefinida duerme en la pequeña terraza de madera, ignorante del horror que tuvo lugar allí, en uno de los tantos barrios de Villa Alemana. La primera casa del terreno, la que da a la calle, aún tiene sus tres ventanales rotos, apedreados por una turba furiosa que amenazó con quemarla. Pero el domicilio de Hugo Bustamante ya no tiene el encintado de la policía que lo protegía como sitio donde el 6 de agosto se halló enterrado y desmembrado el cuerpo de la adolescente Ámbar.Un tacho de basura, con contenido en su interior, denota que hay gente ocupando una de las tres viviendas del predio. El llamado a gritos a sus posibles moradores no da respuesta.De la casa adyacente sale una vecina, que confirma que, luego de que de la propiedad se fueran las tres familias vinculadas al imputado (la de su conviviente, Denise Llanos, la de una de sus hermanas y su madre), volvió gente a ocuparla.La mujer, que es joven y está arreglada como para ir a trabajar, expresa que eso la tiene intranquila. "En la noche se siente movimiento", comenta, con una sonrisa nerviosa, señalando que el aspecto de sus nuevos vecinos "es de temer, creemos que pueden ser amigos de Bustamante".Unas casas más allá, los hermanos Christian y Charlotte Ayala preguntan con extrañeza quién se iría vivir a un lugar donde ocurrió un crimen tan horrendo. Dicen que los nuevos moradores han mostrado poca empatía con la sensibilidad vecinal, al comentar que ellos están agradecidos de la situación que les permite vivir con comodidad. Los abogados que han consultado les señalan que nada se puede hacer si el dueño resolvió arrendar la propiedad.Todo ello ha enervado la situación en el barrio frente a la familia Bustamante, a la que critican la indiferencia que habrían asumido durante la desesperada búsqueda de Ámbar."El discurso de la familia, que se molestaba con la búsqueda y encaraba a los vecinos a garabatos, no nos deja tranquilos", comenta Charlotte.El sentir de los vecinos se muestra de forma expresiva a lo largo la calle Covadonga. Todo el último recorrido que Ámbar realizó antes de ser asesinada, desde la casa en la que vivía con su tutora legal, Mariza García, hasta los 600 metros cuesta arriba donde la vía termina (poco más allá de donde vivía Hugo Bustamante), las paredes están tapizadas con carteles en su memoria. Algunos provienen del tiempo de su búsqueda, pero la mayoría claman justicia contra su victimario y añaden mensajes contra la familia Bustamante a la...

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