Tigres, fútbol, matrimonios: Los secretos de la residencia presidencial argentina
El libro, publicado hace poco por editorial Aguilar, cuenta historias de poder de la quincena de familias presidenciales que han vivido en ese terreno de 35 hectáreas, cercado por un muro de ladrillos rojos y edificado en 1854. Historias de muertos, de farándula y de animales. Como el tigre del tres veces Presidente Juan Domingo Perón.
Hoy nadie recuerda cómo llegó el tigre hasta la residencia presidencial -escribe Vallejos-, ni tampoco "dónde terminó sus días ese ejemplar majestuoso". La periodista cuenta que el animal fascinaba a las hijas pequeñas del administrador del lugar, que decían que el tigre no era atemorizante; que algunas noches los rugidos se escuchaban a lo lejos; que el tigre no se paseaba libremente por el parque, pero sí tenía su propio espacio, una jaula grande; que Perón solía visitarlo.
"Una de las cosas que me encontré con la quinta es que, esto es conocido acá, el Estado argentino no es muy regular en el registro, en la documentación de su propia información", dice Vallejos a "El Mercurio". Por ejemplo, sobre el tema de los animales, "que en la quinta no es un tema menor, aunque de entrada te pueda parecer una frivolidad", se encontró que no hay registro de los animales que pasaron por ahí.
Entonces, para buscar la historia de la quinta tuvo que recurrir a todo tipo de material, desde lo periodístico hasta lo poco que puede haber del Estado, además de relatos. "Yo confío mucho en los testimonios, en la memoria de las personas, para mí es fundamental eso. Lo del tigre, por ejemplo, no está en los registros del Estado, pero hay gente que lo vio; gente que todavía vive, que vivió ahí, y que lo vio", agrega.
Otra historia del libro es la del loro Coco, el único animal que el radical Fernando de la Rúa (1999-2001) dejó en Olivos cuando reemplazó a Carlos Menem. Según la historia -que la autora dice que los radicales niegan-, alguien le enseñó a Coco a decir: "!Viva Perón¡", que hacía mucha gracia al último de los presidentes no peronistas antes del actual Mandatario Mauricio Macri.
El más querido
Vallejos cuenta que de todos los presidentes que pasaron por la residencia, el más popular entre los trabajadores del lugar es el justicialista Carlos Menem (1989-1999). Después de asumir, Menem vivió cerca de un año en Olivos con Zulema Yoma -la historia de la mandrila Zulema es imperdible-, hasta que, en un episodio transmitido en directo por la televisión, el Presidente echó a su esposa de la quinta.
"A partir de entonces...
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