'He tenido que aprender a convivir con el Párkinson'
-A tener paciencia, a aceptar que las cosas pasan. Que uno no controla todo y que hay que seguir viviendo.
Juan Villarzú Rohde, 72 años, ingeniero comercial, máster en economía de la Universidad de Chicago, ex presidente de Codelco en dos períodos, ex secretario general de la Presidencia de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, separado, tres hijos, hoy está retirado de las pistas políticas, con un Párkinson que lo aqueja hace más de veinte años y que ahora lo tiene sentado en una silla de su oficina, con un constante y brusco movimiento de cuerpo, pero con su cabeza impecable, como él mismo se encarga de aclarar.
Pero sigue pensando en política. De hecho, dice que está preocupado por las asambleas constituyentes.
-Estoy con el alma inquieta, me siento culpable por no haber participado en ninguna. Pregunté a diferentes amigos y ninguno iba a hacer una. Creo que voy a tener que convocar a una yo. No me queda otra -explica, mientras su silla se mueve de un lado a otro.
Fue en 1995, cuando era presidente ejecutivo de Codelco, que a Juan Villarzú le detectaron Párkinson. Su primera visita al médico fue porque su mano tiritaba sin razón. Tenía 52 años y una carrera en ascenso.
-Yo soy bien poco aprensivo, entonces dejé pasar un tiempo. Finalmente fui al médico porque me parecía raro este temblor de las manos que no se iba. El Párkinson no es fácil de diagnosticar, entonces me hicieron muchos exámenes, me estudiaron durante seis meses. No tenía otras molestias, solo era el temblor.
Finalmente el diagnóstico fue lapidario.
-Lo primero fue digerir esta cuestión, imaginarse todo lo que podía significar en mi vida. Se lo conté a mi mujer de ese entonces. Pero después fue, "ya, OK, hay que vivir con esto". Traté desde el principio de asumir la enfermedad.
Una de las primeras cosas que hizo fue contarles a sus colaboradores en Codelco.
-Les dije: "Me pasa esto. No se extrañen si se me empieza a mover la mano".
-¿No le dio temor que se generara rechazo o desconfianza en sus decisiones por su enfermedad? ¿O que le pidieran que dejara su trabajo?
-No, ¿por qué iba a pasar eso? La verdad es que yo en eso soy un poco irresponsable, nunca me he preocupado mucho del tema de la pega, siempre he operado sobre la base de que alguna oferta interesante me va a llegar. En ese momento no fue diferente. Siempre me he tenido fe.
Juan Villarzú fue dos veces director ejecutivo de Codelco: la primera, entre 1994 y 1996, cuando Eduardo Frei Ruiz-Tagle fue elegido Presidente; la segunda, en 2000, en el gobierno de Ricardo Lagos. Entremedio, Frei le pidió que asumiera como ministro secretario general de la Presidencia.
Dice que solo le contó al Presidente Frei de su enfermedad cuando este le ofreció el nuevo cargo.
-Él me contestó: "Mientras no te afecte el trabajo, no hay problema". En esa época era muy leve el Párkinson que tenía.
Con Ricardo Lagos fue igual.
-Yo salí del gobierno de Frei y me fui para la casa. Estuve dos años de consultor y después, cuando llegó Lagos, me dijo: "Mira, quiero que retomes Codelco". Pero ahí le dije: "Presidente, yo tengo esto y no estoy seguro de que no vaya a afectar mi rendimiento, así es que piénselo". Me respondió: "No, échele para adelante, nomás".
-¿Por qué tenía dudas de que iba a afectar su rendimiento?
-Es lo mismo que me pasa ahora, yo sé que no funciono ocho horas al día, sé que funciono bien cuatro horas, y más o menos, seis. Porque físicamente me canso.
El desgaste que le provocan los movimientos involuntarios de su cuerpo es igual a estar haciendo ejercicios constantemente.
Villarzú dice que Lagos no tuvo ningún problema en trabajar con él, pero que sí hubo gente a su alrededor que le hizo una "contracampaña". No quiere dar nombres, pero cuenta que varios pusieron reparos a su nombramiento debido a su enfermedad.
Describe esos cuatro años de trabajo como...
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