En Tedeum, cardenal Ezzati convoca a un 'gran propósito nacional' basado en el diálogo social
En la celebración ecuménica de oración por la patria participaron los representantes de las iglesias Católica Ortodoxa; Luterana, Anglicana y Metodista Evangélica, junto con las confesiones no cristianas, como la judía y la musulmana.
El ingreso a la Catedral tuvo estrictas medidas de seguridad, sobre todo a las personas que trataban de acercarse al templo en sus vehículos.
Pasadas las 11:00 horas llegó la Presidenta Michelle Bachelet para unirse a las otras autoridades presentes, como ministros, parlamentarios, magistrados y diplomáticos, entre otros.
Monseñor Ezzati hizo un preámbulo con lo que fue el Acuerdo Nacional convocado en 1985 por el entonces arzobispo de Santiago, el cardenal Juan Francisco Fresno, al presentar su propuesta de "propósito nacional".
"¿Será muy ingenuo pensar en convocar a un gran propósito nacional, basado en el diálogo social, concebido como un decisivo pilar para avanzar y concretar una nueva cultura de 'proyecto país', que permita unirnos en torno a los principales desafíos y oportunidades que enfrentamos, para humanizar y compartir con equidad el desarrollo de Chile?", luego de lo cual nombró las cuatro bases para dicho acuerdo (ver citas).
En su homilía, el arzobispo manifestó igualmente su preocupación por "el narcotráfico, que envenena el alma y la vida de tantos jóvenes; la violencia de las bombas que producen inseguridad y temores; los tiroteos en nuestras poblaciones, los asaltos y los robos".
Debate educacional
Monseñor Ezzati defendió el rol de la Iglesia en el debate sobre la reforma educacional. "Tampoco es de Dios que 700.000 jóvenes ni estudien ni trabajen. No es de Dios que no logremos una educación de calidad para los jóvenes y niños de nuestra patria". Además, agregó: "La Iglesia, que sigue siguiendo las huellas de su maestro, ha sido pionera en Chile en educación y en salud, en dar albergue a los enfermos y desamparados", y reiteró su postura en favor de la vida, "desde la concepción de una persona hasta su muerte natural y durante todo el transcurso de su existencia". Enfatizó también su defensa de la familia fundada en el matrimonio.
Monseñor aludió a las movilizaciones sociales. "No puede ser que pasemos de la discusión a la exigencia, de la exigencia a la toma, de la toma a la ocupación 'hasta las últimas consecuencias'", afirmó Ezzati.
Luego de la homilía, la Presidenta dijo que "los chilenos y chilenas somos solidarios, alegres, con la talla a flor de labio, pero a veces también sobrios...
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