La Semana Política
Aislamiento y convicción
En los países que han enfrentado el fenómeno de la violencia insurgente, sea de origen ideológico al estilo de las FARC colombianas o de tipo separatista como ETA del País Vasco, el consenso transversal de repudio de la sociedad al uso de la violencia y el aislamiento de esos grupos ha sido un componente fundamental en su derrota o actual debilitamiento.
Los países que mantienen su mundo político dividido frente al uso de la violencia retardan la toma de conciencia frente a esa amenaza y pagan altos costos humanos.
El asesinato -quemados vivos- del matrimonio Luchsinger, presuntamente por extremistas mapuches, remeció al país y el gobierno del Presidente Piñera tomó el riesgo de impulsar un inédito diálogo transversal para consensuar un amplio acuerdo político, con aspectos institucionales y legales -reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas, modificación de la ley indígena, instauración de una modalidad de representación política de los pueblos originarios y regulación precisa sobre cómo ejecutar el proceso de consulta a las etnias del convenio 169 de la OIT-, con la amplia participación de las propias comunidades mapuches y autoridades locales de La Araucanía, capaz de generar un nuevo entendimiento y política de Estado para esa región.
El desafío enfrenta enormes complejidades.
Las distintas visiones sobre el origen del conflicto mapuche no pueden traducirse en actitudes comprensivas hacia la violencia y actos terroristas. En palabras del presidente del Senado, Camilo Escalona, "no se debe dar ropajes ideológicos a estos crímenes". En la amplia condena del mundo político al atroz crimen del matrimonio Luchsinger desentonó la comedida expresión de lamento -sin condena- del Partido Comunista.
Responsabilidad del Estado
También existe confusión en algunos, lo que se traduce en expresiones retóricas, pero alejadas de la realidad, como las de una alta autoridad eclesiástica al calificar el refuerzo policial en La Araucanía como "militarización".
¿Qué pensarán de eso las víctimas de hechos de violencia que se han sucedido uno tras otro toda esta semana?
Asimismo, extraña que la directora del Instituto de Derechos Humanos, entrevistada en esta edición, incluya en las opciones de diálogo a organizaciones reconocidamente violentistas como la CAM, cuyos cabecillas se encuentran cumpliendo condenas. Sus críticas a la ley antiterrorista ponen en cuestión los esfuerzos del Estado por restablecer el orden público...
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