Sebastián Somerville: El socio minoritario de STF Capital que toma las riendas de la fallida corredora de bolsa
El 8 de agosto cambió la vida de Sebastián Pablo Andrés Somerville Barbosa, el empresario hijo del emblemático expresidente de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF) y de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Hernán Somerville Senn.Ese día, la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) anunció millonarias multas a dos de sus socios (Ariel y Daniel Sauer) y al gerente general (Luis Flores) de STF Capital Corredores de Bolsa por "proporcionar información falsa al mercado, al público y a la CMF, efectuar operaciones con el objeto de fijar el precio de un valor, realizar operaciones ficticias, no cumplir con los índices de cobertura patrimonial y realizar operaciones de su giro, pese a estar suspendidas sus actividades".Además de las multas en dinero a la corredora (13.500 UF), a los Sauer (9.000 UF a cada uno) y a Flores (10.800 UF), la autoridad también determinó la cancelación del Registro de Corredores de Bolsa y Agentes de Valores, lo que en definitiva significó que la corredora de bolsa no podrá seguir operando.La sanción también inhabilitó por cinco años a los Sauer y a Flores, quienes no pueden intervenir en los asuntos de la corredora ni en ninguna entidad fiscalizada por la CMF.Por eso cuando Somerville, que ingresó con un 10% de la propiedad a la corredora de bolsa -pero cuyo porcentaje actual está por verse tras el aumento de capital y los problemas que ha tenido la intermediaria bursátil-, planteó al directorio que él estaba disponible para asumir la presidencia y hacerse cargo de lo que viene, la idea fue bienvenida."Su misión es cerrar la corredora de la manera más ordenada posible. Responder a los acreedores y apelar a todo lo que se pueda apelar, pero sabiendo que la instrucción de la CMF es clara", afirma una persona que estuvo presente en esa reunión de directorio.Fuentes de STF aseguran que la corredora de bolsa cuenta con un patrimonio que equivale a tres veces el total de sus acreencias, lo que le permitirá responder sin dificultades a empleados, clientes y proveedores. Pero también deberá auditar sus activos para liquidarlos y responder a los accionistas (ver recuadro)."Desde esta última perspectiva, Sebastián también se siente víctima de lo ocurrido con los Sauer, por un exceso de confianza", agrega una persona que ha conversado con él durante las últimas semanas.Otra de sus tareas es lograr que la opinión pública entienda la situación ocurrida con STF Corredores de Bolsa de una...
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