La revolución de Lena Dunham
Hija de un progresista matrimonio vinculado al arte -padre pintor y madre fotógrafa y diseñadora-, a los 25 años irrumpió en la industria del entretenimiento hollywoodense, generando una verdadera revolución televisiva. Un medio que en los últimos años está viviendo una época de creatividad y talento -mientras el cine se concentra en la rentabilidad de los blockbusters-, y también ha comenzado a dejar atrás décadas en las que encasilló a sus personajes femeninos al plano doméstico, a la frivolidad o su apariencia física. Y quien ha liderado este proceso ha sido Lena Dunham y su serie "Girls", que partió en 2012.
En el primer capítulo de la serie, la aspirante a escritora Hannah Horvath -protagonista y alter ego de Dunham- se autoproclamaba "voz de una generación", y aunque la declaración era un efecto de una accidental ingesta de opio, se convirtió en profecía autocumplida. Hoy el programa, que se encuentra preparando su sexta y última temporada, es el emblema de la generación millennial, que hasta entonces había sido abordada desde afuera: por productores o directores baby boomers o de la generación X; no por alguien nativo.
Si bien "Girls" tiene el 40% del rating de "Game of Thrones", su impacto en redes sociales ha contribuido a su éxito. Desde "Sex y the city" (1998-2004) que una serie protagonizada por mujeres no tenía tanto impacto cultural. Aunque algunos quisieron ver en "Girls" una versión hípster de la serie protagonizada por Sarah Jessica Parker, aparte de coincidir en el canal (HBO), el escenario (Nueva York) y el número de personajes protagónicos, sus perfiles son distintos. La primera hacía eco del empoderamiento femenino de fin de siglo, básicamente derivado de la independencia económica y de que no todas las mujeres tuvieran como meta de vida el matrimonio. Pero el cuarteto formado por Hannah y sus amigas Marnie, Jessa y Shoshanna está lejos del consumismo y la obsesión por la moda -les tocó independizarse en una economía tendiente a la recesión-. Lo que las define es que construyen su identidad de manera distinta a como lo hicieron sus madres y abuelas: lejos de la idea de ser perfectas.
Mujeres reales
La elección del término "girls" para darle nombre a la serie no es circunstancial. No solo alude a la edad de los personajes -veinteañeras que no dejan de ser adolescentes y no entran de lleno a la adultez-, también representa una exaltación de lo femenino. Esta opción en la serie parte por la naturalidad: las protagonistas no están esclavizadas por cánones estéticos tradicionales; su vida sexual no siempre es satisfactoria; no salen con exitosos millonarios sino que con...
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