'No hay, a mi entender, responsabilidades formales del ministro de Economía, del subsecretario o del Presidente'
Días agitados le ha tocado vivir a Osvaldo Larrañaga. Como integrante de la Comisión Revisora del Censo 2012, tuvo la tarea de asumir la vocería de esa instancia, papel que se transformó en crucial tras conocerse el informe que aconsejaba repetir el censo.
-Ustedes exponen la hipótesis de que se opta por un censo de derecho por temor a los movimientos estudiantiles...
"Quiero ser muy claro. La principal causa es que se cambió la metodología del censo de hecho a derecho ocho meses antes de comenzar el trabajo de terreno. Ese fue un tiempo demasiado corto, muy insuficiente para preparar un tipo de censo que nunca se había hecho en Chile. ¿Qué motivó el cambio? Hay dos versiones. La del ex director del INE Francisco Labbé, donde plantea que existía una dificultad para reunir el número de censistas para un censo de hecho, que son cientos de miles, y que históricamente se ha hecho con estudiantes y funcionarios públicos. Él propuso pasar a un censo de derecho que permitía hacer un censo prolongado de modo de trabajar con menos censistas, que serían remunerados y mejor preparados. Esa es su argumentación y es válida".
"Tenemos otro tipo de entrevistados que suponen que la motivación subyacente es que dado que en 2011, en agosto, cuando se tomó esta decisión, se vivía el momento más álgido del movimiento estudiantil, ello podría haber complicado el conseguir censistas para un censo de hecho y por eso se optó por uno de derecho. Esta no es una hipótesis nuestra, porque no sabemos qué pasó en la cabeza del director".
-¿Qué responsabilidad pudo tener el ministro de la época, el subsecretario o el mismo Presidente? ¿Fue engañado el Mandatario?
"No estaba dentro de nuestros términos de referencia identificar responsabilidades políticas. Como opinión personal, puedo decir que la responsabilidad recae en el director del INE, puesto que los decretos del caso establecen que es también el director del censo. No hay, a mi entender, responsabilidades formales del ministro de Economía, del subsecretario o del Presidente, salvo haber nominado como director del INE a una persona que cometió errores importantes en la toma de decisiones. A mi juicio, pareciera ser también que la dirección del INE dio seguridades a las autoridades políticas de que se podría hacer el nuevo censo de derecho sin necesitar mayor tiempo de preparación. No es que el Presidente haya sido "engañado", lo que supone un acto de mala fe del "engañador". Más bien pienso que hubo un error grueso...
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