Un respiro en el cuidado - 31 de Diciembre de 2022 - El Mercurio - Noticias - VLEX 917060993
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Un respiro en el cuidado

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Vincent

Es una mañana de jueves en El Quisco y Juan Canales, de 80 años, se sienta en el living, mira por la ventana y espera. La mañana está aún fresca, pero el cielo luce despejado. Juan, un exsupervisor de un banco en Santiago que se vino a vivir a la playa tras jubilar, lleva puesta una camisa blanca a rayas y un chaleco azul marino sin mangas. Su mujer, María Natividad Riveros, de 82, está sentada en la cama, ya tomó desayuno y está abrigada con un polar rosado que Juan le ayudó a ponerse. Él la cuida 24 horas al día y la asiste en todas sus tareas desde que ella tiene alzhéimer. Él es su cuidador permanente.La pareja vive en los Cuatro Ases, una comunidad de vecinos a un kilómetro de la playa donde residen 21 familias. Habitan una casa sencilla, levantada en paneles de madera terciada. Él diseñó esa casa a medida y la construyó en 2000 con el plan de envejecer ahí y plantar árboles frutales, cuando sus tres hijos (hoy de 60, 53 y 38) tuvieran autonomía financiera.Pasadas las 9:30 llega Paz Chandía, vestida con un uniforme azul donde se lee "Cuidadora de respiro de El Quisco". Tiene 58 años y está jubilada de TENS de un hospital en Santiago.-Ya, váyase para que se relaje -le dice Paz a Juan, mientras abre las cortinas, saluda a María Natividad y la acomoda en la cama.En las próximas cuatro horas, Paz se encargará de todos los cuidados de la mujer: bañarla, cambiarle los pañales, darle su dosis de memantina, un remedio para el alzhéimer, y llevarla al living, el lugar más fresco de la casa en verano. Además, se ocupará de las tareas domésticas: cambiar las sábanas, echar la ropa sucia a la lavadora, ordenar la cocina.-Me voy, vuelvo a las 13:00 -le dice Juan dándole un beso a su mujer, quien solo sonríe, porque ya no habla. En las próximas cuatro horas, las únicas libres que tiene durante la semana, Juan gozará de lo que se denomina "un respiro"; es decir, delegar el cuidado de su mujer en una cuidadora temporal para que él pueda hacer cualquier otra cosa.Esta mañana de jueves de diciembre, Juan no perderá ni un minuto: irá de compras a la feria y la carnicería, y aprovechará de hacer algunos trámites en la municipalidad y el Registro Civil. Y pasadas las 11:00 cumplirá con su compromiso más importante: reunirse con otros cuidadores y cuidadoras permanentes en la reunión semanal en la Junta de Vecinos número 1 de Isla Negra, una instancia que él valora, porque es el momento de compartir y hablar con otros en su misma situación, sobre todo lo que sucede puertas adentro mientras se cuida a un ser querido.La sede de la Junta...

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