¿Relevo en el liderazgo? - 11 de Marzo de 2013 - El Mercurio - Noticias - VLEX 427079550

¿Relevo en el liderazgo?

No es novedad: nuestra región ha tenido al general Juan Domingo Perón, a Fidel Castro y, el más reciente, Hugo Chávez. Todos ellos trascendieron las fronteras de sus naciones, intentando ejercer un liderazgo revolucionario regional. ¿Quién tomará ahora el relevo del fallecido Presidente venezolano?

América Latina no necesita un nuevo caudillo y, por fortuna, no se avista hoy en la escena política latinoamericana a alguien con la ambición, la voluntad de poder y el carisma -requisito imprescindible- que caracterizaron a Chávez.

Seguidores sí hay varios posibles; reemplazantes, ninguno. El delfín de Chávez, Nicolás Maduro, hasta ahora no parece estar a la altura de su jefe. Entre los aliados de Venezuela, sobresalen Rafael Correa, de Ecuador, y el boliviano Evo Morales. Pero ambos, más que pares, fueron buenos discípulos del líder venezolano, y no muestran las condiciones necesarias para encabezar el proceso revolucionario "bolivariano" que Chávez intentó desarrollar.

Correa tendría más peso ideológico que Morales, pero, como el boliviano, dirige un país pequeño, y no tiene la relevancia política ni los recursos económicos necesarios para asumir esta posta.

No cabe olvidar a Cristina Fernández, que sin Chávez parece hoy más chavista que antes. Sin embargo, la Presidenta argentina -como antes su cónyuge, Néstor Kirchner- nunca ha mostrado particular interés por las relaciones internacionales y, dadas las dificultades económicas de su país, es improbable que pueda dedicar tiempo y energía a este asunto.

¿Nuevo espacio para otras potencias regionales?Con el vacío dejado por Chávez, queda en suspenso la sobrevivencia de la extrema izquierda en América Latina, y se abre una oportunidad para que los moderados retomen influencia en la izquierda regional, lo que estaría más acorde con los tiempos. Después de todo, más países latinoamericanos tienen gobiernos de centroizquierda que de la línea chavista, y ex guerrilleros son hoy moderados presidentes, como Mujica en Uruguay. Por otra parte, hasta las FARC están en la línea de incorporarse a la vida política, como lo hizo el FMLN en El Salvador.

Brasil, que busca un lugar como potencia en las grandes ligas globales, ha sido un promotor de iniciativas regionales -Unasur, por ejemplo- y moderador de las políticas extremas venezolanas. Lula da Silva logró ejercer poder e influencia; en cambio, Dilma Rousseff se ha concentrado, más bien, en ordenar la casa. Podría ser el momento de que Brasil asuma un...

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