Reforma tributaria en nueva etapa - 13 de Abril de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 777618041

Reforma tributaria en nueva etapa

Tras ocho meses de intensos debates y negociaciones, la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados aprobó la idea de legislar la reforma tributaria. Este avance, que se espera haya frenado el deterioro en las expectativas que estaba generando su dilación, fue posible gracias al apoyo de la Democracia Cristiana, cuyo gesto constituye una señal positiva que debe resaltarse. Un Poder Legislativo abierto al diálogo y consciente de su rol en temas de alta sensibilidad resulta fundamental para el progreso y la gobernabilidad.Sin embargo, más allá de dicha señal, ha sorprendido la falta de conciencia entre los parlamentarios respecto de la imperiosa necesidad de contar con una estructura tributaria que entregue mayor competencia a nuestra economía y, particularmente, a su sector productivo. Cabría esperar que las preocupaciones políticas respecto del monto total de recaudación fuesen acompañadas por un mínimo reconocimiento de que el crecimiento económico también es virtuoso en cuanto a generar mayores recursos fiscales. El Ejecutivo debe realizar todos los esfuerzos para que esa visión se incorpore al debate.Sistema integrado favorece más a los tramos más bajosEn líneas generales, la propuesta tributaria del Ejecutivo tiene por finalidad dinamizar la inversión y el crecimiento económico sin sacrificar la sostenibilidad fiscal y la progresividad impositiva, corrigiendo también errores del sistema actual.La principal medida es la reintegración del sistema. Desde la reforma de 2014, el accionista de una empresa puede descontar en su declaración del Impuesto Global Complementario (IGC) -aquella que considera las rentas del trabajo y del capital- solamente el 65% del 27% antes pagado por la compañía por concepto de impuesto de primera categoría, gravándose "dos veces" el 35% restante. De esta manera, se genera una tasa adicional de 9,45% (35% del 27%) sobre las rentas del capital. Evidentemente, la corrección de esta distorsión daría un impulso a la inversión.Los detractores plantean que las personas con mayores ingresos serían las principales beneficiadas. Esta postura suele sustentarse en estimaciones del Servicio de Impuestos Internos que indican que, aproximadamente, 25 mil contribuyentes en el tramo más alto del IGC ahorrarían US$ 229 millones en impuestos de establecerse la total integración, cifra superior al ahorro que se alcanzaría en cada uno de los tramos restantes.Este argumento, sin embargo, adolece de importantes falencias. Si bien...

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