Reforma tributaria en EE.UU. - 9 de Diciembre de 2017 - El Mercurio - Noticias - VLEX 698626973

Reforma tributaria en EE.UU.

En lo que ha sido una administración sin éxitos legislativos, los avances de la reforma tributaria en el Senado de Estados Unidos representan un importante logro para el Partido Republicano que busca con urgencia contar con resultados ante la inminente elección parlamentaria de 2018.

En líneas generales, la nueva legislación busca reducir y simplificar el complejo código tributario estadounidense. Uno de sus elementos centrales es la reducción del impuesto corporativo federal desde el actual 35% -el mayor de la OCDE- hasta un nivel de 20%. Con esto, el país del norte se suma a la tendencia internacional de reducción de tributos a las empresas. Adicionalmente, con una revisión de las tasas asociadas a ingresos domésticos de sociedades o empresas de un solo dueño, el cambio aprobado por el Senado avanza en la integración del sistema tributario. La reforma contiene también modificaciones en la tributación internacional de las firmas, lo que se espera genere incentivos para que las empresas inviertan y desarrollen la mayor parte de sus actividades en los Estados Unidos, evitando así las operaciones internacionales en países con menores impuestos.

En cuanto a los impuestos personales, el Senado promueve una reducción de la tasa máxima desde el actual 39,6% hasta un 38,5%, manteniendo los siete tramos existentes, aunque elevando el tramo exento desde US$ 6.500 a US$ 12.000 al año. Se doblan además las deducciones estándar, eliminando o reduciendo aquellas provenientes de los tributos estatales y locales, lo que debería significar una importante simplificación para las personas.

Tendencias en el impuesto a las empresas

La drástica reducción del impuesto corporativo en los cambios aprobados por el Senado da cuenta de la pérdida de competitividad que han sufrido las empresas de Estados Unidos ante los cambios en los sistemas tributarios en el mundo.

En las últimas décadas, los niveles de impuesto a las empresas han mostrado tendencias decrecientes en muchos países desarrollados. Si en 2003 el promedio de este impuesto en la OCDE era de 30%, actualmente se encuentra en torno al 25%. Parte de este cambio se debe a una mayor competencia para la atracción de capitales e inversión en un mundo abierto y altamente globalizado. De hecho, desde 2014 han sido 14 los países de la OCDE que han disminuido este tributo con reducciones que promedian los 3,24 puntos porcentuales (p.p.). Las mayores disminuciones han sido Hungría, cuya tasa cayó de 19% a 9% este...

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