El recolector de vidas extremas - 10 de Julio de 2022 - El Mercurio - Noticias - VLEX 907273212

El recolector de vidas extremas

E l fotógrafo de naturaleza y deportes extremos Paolo Ávila (34) conoce de cerca las zonas más aisladas de Chile. Por su trabajo, registrando adrenalínicas disciplinas como escalada en hielo, montañismo o exploraciones en kayak, ha visitado aquellos sitios que, de tan desconocidos, casi no se encuentran en los mapas de nuestro país. Zonas tan remotas que prácticamente están inexploradas, como son, por ejemplo, las profundidades cordilleranas de la Región de Aysén o los ventisqueros en Tierra del Fuego.Gracias a estos viajes, el fotógrafo ha podido conocer de cerca a personas cuyas historias de vida se salen completamente de "la norma". Gente que dejó todo para irse a vivir a un fiordo perdido en medio del aislamiento; mujeres y hombres que hacen patria en la naturaleza y que a diario arriesgan su vida, no duermen, pasan frío extremo, con un solo motivo: vivir en su ley, para cumplir sus sueños."Es gente que se salió del sistema tradicional para vivir los terrores y riesgos de los ambientes extremos. Montañistas baguales, creadores de reservas mundiales, patagones criados en los sitios más extremos o referentes del mundo deportivo. Son personas que vibran con sus pasiones y viven para ello", dice Ávila para explicar por qué decidió dedicar casi dos meses a viajar esta vez documentando historias anónimas de chilenos que ha conocido en estas zonas como una apuesta por mostrarle al mundo testimonios de tesón y resiliencia.De Pucón a Tierra del Fuego, y con 8 mil kilómetros recorridos, fue la ruta que Ávila hizo para registrar a más de una decena de personas que, dice, llevan vidas inimaginables. Ellos serán el corazón de Unlocation (algo así como "Sin ubicación", en inglés), el documental donde se centró en la experiencia de personajes como Nicolás Palma, que es escalador en Cochamó; Pedro Aniol, que hace kayak en Futaleufú, o Andrea Cuevas, que trabaja como esquiladora en Tierra del Fuego, quienes muestran la rudeza de sus vidas cotidianas."Al grabarlos, intentamos convivir con ellos, acompañándolos en sus actividades. Si ellos escalaban, escalamos con ellos. Si caminaban, caminamos con ellos. Si remaban, remamos con ellos. La idea era llevar su piel en nuestra piel, y así guardar su experiencia para encender el fuego de quienes vean nuestro documental", dice Ávila.El proyecto, según el fotógrafo, se estrenará en cines en octubre, luego de que editen todo el material reunido durante el viaje austral que comenzó en abril pasado. En total, dice...

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