Razón y fe - 14 de Enero de 2018 - El Mercurio - Noticias - VLEX 700977781

Razón y fe

Uno de esos textos es obra del fundador de la filosofía moderna, Descartes. El otro, de quien puede considerarse el fundador de la teología cristiana, San Pablo. El primero habla desde la razón y escribe unas Meditaciones Metafísicas . El otro, desde la fe, dirige una Carta a los Romanos . Más de un milenio les separa: una tradición de muchos siglos, al hilo de la Sagrada Escritura. La razón y la fe, la metafísica y la teología, la verdad y la realidad, el amor y la inteligencia pueden articularse limpiamente en la unidad de un saber fundamental.

Existencia y Libertad en Descartes

Meditaciones acerca de la metafísica, a las que ya Aristóteles llamó "filosofía primera" - prima philosophie , dirá Descartes- que demuestran la existencia de Dios y la inmortalidad del alma: así define Descartes el proyecto de su obra. Una "meditación", el espíritu recogido en sí mismo, lleva a cabo un discurso racional acerca de realidades que parecieran incognoscibles. Aristóteles preguntó: ¿Cuáles son los primeros principios del saber? Descartes recoge sus pasos: ¿Cuál es el fundamento de las ciencias modernas que él mismo, a la par de Galileo y Newton, forjaron?

La cuestión del fundamento del saber y de las ciencias desencadenará en la metafísica cartesiana la duda metódica . Y en las dos primeras Meditaciones Metafísicas la duda va a desbaratar las evidencias primarias que subyacen al saber y a las ciencias. Los argumentos del escepticismo de Sexto Empírico en los finales de la filosofía antigua, y del voluntarismo divino en el pensamiento de Duns Scoto y de Guillermo de Occam, en los finales de la Edad Media, permiten a Descartes alcanzar una conclusión decisiva: "Nada se sabe". No en el sentido de Montaigne, sino en el sentido de Sócrates. Frente a aquellos momentos históricos decadentes, la catarsis de la duda cartesiana recuperará la fuerza originaria del pensar metafísico. Cogito ergo sum es su afirmación fundamental.

La filosofía moderna traiciona a su fundador si entiende que el fundamento del saber no es sino una dinámica inmanente al pensamiento mismo, que termina siendo pura sicología (Hume), o idealismo trascendental (Kant).

No. Lo que Descartes afirmó en el cogito es la existencia: ergo sum . La existencia o el ser, dijo explícitamente. Esta afirmación no puede ser puesta en duda sin caer en contradicción. Cualquiera tentativa de ponerla en duda la confirma. Ella nace, brota, se alza como la intuición esencial que la duda comporta. Como la...

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