La protesta del rector
Ese jueves 18 de junio, el muñeco del rector recorrió la universidad, arrastrado por estudiantes que protestaban con lienzos y le gritaban lo que no podían decirle a la cara. Luego lo dejaron de pie en la Alameda, lo bañaron en bencina y aplaudieron mientras ardía.
Dos semanas después, el verdadero Juan Manuel Zolezzi, 63 años, sentado en su oficina, recuerda ese día:
-Afortunadamente no lo vi, me lo contaron. Pero están perdiendo el tiempo los cabros. ¿Qué sacan con eso? ¿Me van a meter miedo?
Juan Manuel Zolezzi tenía 8 años en 1960 cuando Valdivia, su ciudad natal, fue el epicentro del terremoto más fuerte en la historia de Chile. Después de casi 10 minutos de sismo, su casa se desplomó. "Vivimos en la plaza durante cinco días con mi familia, tapados con una carpa. No sentí miedo, pero me tocó ver situaciones complejas, como cuando los adoquines se separaron y cayó gente adentro", recuerda Zolezzi.
Su padre, Tibaldo, consiguió una casa en la actual Población Corvi, en Valdivia. Vivieron ahí por cinco años. Él trabajaba en el mesón del Banco Valdivia y Zaida, su esposa, era costurera. "Mi papá ganaba una miseria y mi mamá llegó hasta a vender hielo", cuenta el rector. Así mantuvieron a la familia y lograron que sus hijos estudiaran. "Éramos seis hermanos, hasta que el mayor falleció. Yo creo que se enfermó porque en el parto usaron fórceps. Mi madre hizo lo imposible por salvarle la vida y llegó a cumplir ocho años, algo inédito".
En ese tiempo, Juan Manuel Zolezzi quería ser basquetbolista profesional. Era uno de los más altos en el Instituto Salesiano de Valdivia -actualmente mide 1,89- y jugaba bien, pero ser deportista y estudiar eran actividades incompatibles. "En ese momento no estaban las condiciones para dedicarse al básquetbol en Chile, que nunca ha sido bien visto y menos remunerado. Y para ir a la NBA me faltaba requetemucho", dice.
Siguió en el Instituto Salesiano y no destacó en las notas. En sexto de humanidades, su último año, decidió que quería estudiar algo relacionado con matemáticas y física, los ramos en los que le iba mejor. En 1970, entró a la U. Técnica del Estado, en Valdivia, a ingeniería en ejecución eléctrica. No sabía de qué se trataba la carrera, pero se convirtió en el primero de su familia en entrar a la universidad.
En marzo de 1973, llegó a Santiago, a estudiar ingeniería civil eléctrica en la U. Técnica del Estado, actualmente Universidad de Santiago. "Viví de pensionista en los salesianos, en la iglesia de la Gratitud Nacional, esa que le dan como tarro en las protestas", dice. A pesar de lo politizada que era su universidad, cuenta que no participó en manifestaciones durante la dictadura. "Venía llegando de provincia y no tenía muchas amistades. Nunca he militado en ningún partido. Yo me dedicaba a estudiar".
Actualmente los alumnos de la Universidad de Santiago, donde Zolezzi ha sido rector por tres períodos y nueve años, llevan 44 días de paro. "Tuvimos que salir a decirles que hicieran un petitorio, porque no habían entregado nada. Cuatro semanas de paro y no sabíamos qué querían. Pidieron algunas cosas de infraestructura que me parecen razonables, pero si me piden un edificio para mañana no puedo hacer así (hace tronar los dedos) y que aparezca.
-¿Qué cosas no le parecieron razonables?
-Me llamó la atención que pidieran cosas como calefacción, aire acondicionado, acústica.
-¿Por qué?
-Porque yo pensé que en la Universidad de Santiago ese tipo de cosas no eran tan relevantes. Algunos pidieron más...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba