Proceso de selección universitaria 2016 - 12 de Enero de 2016 - El Mercurio - Noticias - VLEX 591393786

Proceso de selección universitaria 2016

Dada la confusión y premura con que se gestionó el anticipo de la política de gratuidad, será difícil evaluar su efecto sobre el proceso de selección universitaria de 2016, aunque algunas cifras corroboran lo inconveniente del camino seguido.

La PSU fue rendida el pasado diciembre por poco más de 252 mil estudiantes. De estos, casi 93 mil, esto es, el 37 por ciento, fueron seleccionados en alguna de las vacantes ofrecidas por las 33 universidades que participan en el sistema único de admisiones (las 25 pertenecientes al Consejo de Rectores, más las 8 universidades privadas invitadas). Otros cerca de 8 mil estudiantes también fueron seleccionados, pero utilizando sus puntajes del año pasado o validando estudios. Esto representa un leve aumento en el número de seleccionados respecto del proceso anterior, pero las cifras revelan la relativamente alta selectividad de estos planteles que, de hecho, observaron una pequeña alza en sus puntajes de corte. Por cierto, ello puede obedecer a que entre estas instituciones se encuentra la mayoría de las que han adherido a la gratuidad (son solo dos las universidades gratuitas que están fuera de este sistema único de admisiones). Por supuesto, también pueden existir jóvenes vulnerables que antes privilegiaban institutos profesionales y que frente al encarecimiento relativo de estos, al estar excluidos de la gratuidad, optaron por una universidad.

Al desagregar por procedencia del establecimiento educacional se puede comprobar que a 71 de cada cien estudiantes de colegios particulares pagados se les ofrece una plaza en estas treinta y tres universidades. Esta proporción llega a 37 de cada cien para estudiantes de colegios particulares subvencionados, y a 27 de cada cien en el caso de estudiantes de liceos municipales (este cálculo se hace sobre los que rindieron la PSU, más que sobre los que postularon, porque en esta decisión hay indudablemente un sesgo). Al tomar en consideración esta realidad, es evidente el error que se cometió al comenzar la gratuidad por estas universidades. Por cierto, acceden a ellas estudiantes vulnerables, pero el grueso está en otras instituciones de educación superior. Es difícil, por tanto, que esta política, tal como fue implementada, logre satisfacer las expectativas de las familias de los primeros cinco deciles. La gran mayoría que tiene hijos en la educación superior...

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