'Si el PPD no apoya a Ricardo Lagos se vuelve muy complicada mi permanencia '
El mundo está viviendo una crisis política, dice, para comenzar a conversar. Ve los efectos de esa separación entre política y poder en el Brexit inglés, con Le Pen en Francia, en la elección de Trump. Por eso le preocupa que en Chile la "buena política" sea denostada, incluso por quienes se sientan cómodamente en el Congreso.
Felipe Harboe tampoco coincide con quienes, calculadora en mano, no dan el paso y proclaman a Ricardo Lagos como su candidato. Desde que se lanzó, el ex Presidente es el suyo y sin titubeos. "Es la mejor alternativa, tiene la experiencia para conducir un proceso muy difícil de transición social con reformas que den mayor equidad, pero comprendan que el crecimiento es fundamental".
Es de los que cree que se requieren ajustes, correcciones importantes, mientras "otros hablan de cambios y otros usan la retroexcavadora". Sabe que su posición es minoritaria en el PPD y desde hace meses el senador vive su propia crisis. Ya no siente que sean "La fuerza del cambio", como dice la foto que decora su oficina, y que lo muestra con Guido Girardi y Oscar Santelices en 1989. No ha decidido si "refichará" por el partido que a la fecha es el que menos militantes ha reinscrito, y si lo hace, será si apoyan a Lagos.
-Usted habla de "correcciones importantes" y este gobierno se propuso fundar "otro modelo", ¿fracasó?
-Hubo un intento por refundar un modelo y nadie puede pretenderlo en cuatro años; los cambios estructurales requieren de gradualidad suficiente para implementarlos de buena forma. Valoro el espíritu y la vocación transformadora de la Presidenta Bachelet, el problema es que la forma de implementar esas reformas no estaba pensada y diseñada al comenzar el gobierno. Yo habría comenzado por la educación preescolar, luego la gran reforma a la calidad de la educación básica y media, y luego la reforma a la educación superior, que incluye más que las universidades.
-La oposición dice que a los padres no les gustó perder la libertad de elegir el colegio o que sus hijos entren en una tómbola para decidir su destino.
-La derecha hizo una campaña eficiente de que se iban a cerrar los colegios subvencionados y eso no fue así; lo que ya no se podrá es mejorar la infraestructura de un negocio inmobiliario con dinero del Estado, como ocurría en algunos casos. Pero no se explicó bien. Tomo el punto de que la decisión de una familia de mandar a su hijo a la educación municipal o a la subvencionada no es solo un tema de costo, también está...
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