La política mexicana rompe su 'pacto de silencio' sobre la corrupción y se multiplican las denuncias - 24 de Agosto de 2020 - El Mercurio - Noticias - VLEX 847404277

La política mexicana rompe su 'pacto de silencio' sobre la corrupción y se multiplican las denuncias

La investigación del caso Odebrecht, que desde 2016 ha comprometido a una decena de países de Latinoamérica en un enorme esquema de corrupción -con repercusiones penales sobre todo en las clases políticas de Brasil, Perú, Panamá y Colombia-, hasta ahora había dejado el capítulo de México en suspenso. Las indagaciones locales parecían ir a otra velocidad, pero todo eso cambió la semana pasada con la filtración de las declaraciones judiciales de un testigo protegido: el quiebre de este "pacto de silencio" dejó al descubierto una supuesta trama que implica a tres expresidentes mexicanos, exministros, gobernadores y legisladores en una dinámica de sobornos, compra de votos, regalos ostentosos -uno de ellos un Ferrari- y maletas de billetes. El escándalo, además, dio inicio a una "guerra de filtraciones" de videos políticamente comprometedores, uno de los cuales afecta al actual Presidente, Andrés Manuel López Obrador.El nombre clave de la rama mexicana del caso Odebrecht es Emilio Lozoya, exdirector de la petrolera estatal Pemex (2012-2016) y exasesor de la campaña del expresidente Enrique Peña Nieto (2012-2018). El exdirigente fue extraditado el 17 de julio de España a México por haber recibido US$ 10,5 millones en sobornos de la constructora brasileña, y hoy está colaborando con la Fiscalía General de la República a cambio de beneficios judiciales.Sus acusaciones han provocado un terremoto político en México. El miércoles pasado se filtraron las 63 páginas del testimonio de Lozoya, en el que asegura que actuó bajo las órdenes directas de Peña Nieto y de su mano derecha, el exsecretario de Hacienda Luis Videgaray, quienes construyeron "un aparato organizado de poder que instrumentó lo necesario para obtener beneficios". El exdirector de Pemex reveló que el exmandatario del Partido Revolucionario Institucional (PRI) solicitó a Odebrecht US$ 6 millones para su campaña, y le pidió usar parte del dinero de los sobornos para comprar votos de legisladores del opositor Partido Acción Nacional (PAN) a favor de la reforma energética de 2013, que abrió el sector a la iniciativa privada, lo que habría sido del interés de la firma brasileña. El dirigente detalló cómo organizó con teléfonos desechables la distribución de las maletas con dinero para los congresistas, o la vez que presenció cómo el expresidente se jactaba de que un gobernador, actualmente preso por corrupción, le regaló las llaves de un Ferrari clásico (lo que el exgobernador Javier Duarte...

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