El poderoso hilván entre el vestuario y el activismo - 12 de Noviembre de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 825951285

El poderoso hilván entre el vestuario y el activismo

C uando el 3 de enero de 2019 Alexandria Ocasio-Cortez juró en el Capitolio como diputada del Congreso de Estados Unidos no solo estaba haciendo historia al convertirse en la mujer más joven en asumir ese cargo (29 años), además aprovechó la ocasión para honrar el activismo político femenino, especialmente el legado de las sufragistas. Ocasio-Cortez (nacida en el Bronx, de padres latinos y miembro de la organización Socialistas Democráticos de América) vistió de blanco en la ceremonia y volvió a utilizar ese color un mes después junto con el resto de las congresistas del Partido Demócrata para asistir al discurso sobre el Estado de la Unión de Trump frente al Congreso con más mujeres de la historia: 102 (89 demócratas y 13 republicanas).La elección del traje blanco no fue producto del azar. Aunque el púrpura es el tono más representativo del feminismo (es el color internacional del movimiento por la igualdad de derechos y el tono que las sufragistas estadounidenses adoptaron como uniforme en la marcha de Washington a favor de la Enmienda por la Igualdad de Derechos en 1978), el blanco tiene una tradición más enraizada en la lucha por los derechos de las mujeres: fue el color que vestían las sufragistas en los países anglosajones a comienzos del siglo XX para promover su lucha por el derecho al voto femenino y quienes en 1904 fundaron la Alianza Internacional de Mujeres. Y en 1908, el movimiento sufragista británico se manifestó en el Hyde Park londinense de manera poderosa: más de 30 mil mujeres defendieron su igualdad vestidas con largos vestidos y faldas blancas, precisamente, para garantizar su visibilidad. Así el blanco se convirtió en el color elegido (aunque la bandera sufragista ha mantenido el púrpura y verde) para sus protestas a lo largo de la historia.No es la primera vez que una representante política estadounidense se viste de este color como muestra de solidaridad con sus antecesoras. Así lo hicieron Shirley Chisholm, la primera congresista afroamericana, cuando asumió su cargo en 1968. Geraldine Ferraro, la primera mujer candidata a vicepresidenta, en 1984 cuando aceptó su nominación. En 2016 Hillary Clinton vistió un traje de este color cuando fue escogida como candidata a la presidencia durante la convención demócrata en Filadelfia. Y en esas elecciones muchas mujeres votaron de blanco.La elección de un color o una prenda de vestir como forma de activismo o de protesta no es nueva, pero recientemente ha comenzado a adquirir...

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