Quiénes son y cómo piensan los 'líderes pingüinos' que buscan radicalizar el movimiento estudiantil
Desde séptimo básico que Diego Arraño (16) participa en movilizaciones y asambleas del movimiento estudiantil, como él mismo describe, de forma "pasiva". Sin embargo, en 2014, cuando cursaba primero medio, decidió trabajar en colectivos secundarios porque "desde las galerías no era factible un cambio". Hoy está en tercero medio y es parte de una organización política de estudiantes que se denomina Ofensiva Secundaria.
El presidente del centro de estudiantes del Internado Nacional Barros Arana y vocero de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces), parece tomarse en serio su labor "política": duerme entre tres y cuatro horas diarias, y el jueves -día de la marcha que terminó con la profanación de la iglesia de la Gratitud Nacional- se levantó a las 6:30, fue a un punto de prensa a las 7:00, para luego tomar desayuno y reunirse con su asesor comunicacional. Más tarde fue uno de los líderes de la movilización que se realizó en medio de una polémica con la Intendencia de Santiago por los problemas que generó la rotura de una matriz de Aguas Andinas y que inundó algunas estaciones del Metro en Providencia.
Polémica que también se instaló al interior del movimiento estudiantil, pues la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), liderada por José Corona (17), llamó a las demás organizaciones a deponer la marcha, pero la Confech y Aces, determinaron efectuarla de todos modos "por respeto a sus compañeros", y solo cambiaron el punto de inicio.
Finalmente la jornada terminó con 97 detenidos, 74 de ellos menores de edad, y respecto de los hechos de violencia Arraño asegura que "no entendemos por qué se producen y al final solo empañan el real motivo de la marcha".
La vehemencia asoma como un sello que pretende imponer el nuevo movimiento secundario, y que estrenó el pasado 24 de mayo, cuando 30 estudiantes irrumpieron en el Palacio de la Moneda para desplegar un lienzo con la consigna "Hoy comienza la ofensiva". Desde ese momento los dirigentes secundarios reconocen que han optado por el camino de la radicalización de sus manifestaciones, pues estiman que es la forma en que el Gobierno escuchará sus posturas, las mismas que, de acuerdo a los estudiantes, hasta ahora no han sido tomadas en cuenta.
Diego Arraño 16 años, tercero medio, Internado Nacional Barros AranaAfiliación:
Milita hace un año en Ofensiva Secundaria. Actualmente es el líder de la Aces, organización que se creó en 2001, reemplazando a la Federación de Estudiantes Secundarios.
Principales demandas:
Una condena taxativa al lucro en la educación y que este sea sancionado con cárcel es el...
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