La pesadilla de los Luchsinger
Estos gallos -le dijo Werner Luchsinger a un amigo la última vez que se vieron- se me van a meter en cualquier momento
ecién se había acostado cuando su primo Jorge Andrés Luchsinger lo llamó por celular.
-!Están atacando a mis papás, voy para allá¡
Germán Luchsinger, en su casa del barrio Puerta de Alcalá de Temuco, se vistió de inmediato, tomó su rifle y subió a su camioneta. Había vivido en carne propia algo similar hace cinco años, cuando el fundo de sus padres fue atacado por 12 encapuchados que quemaron la casa, un galpón con 10 mil fardos, la lechería y dos vehículos. Así que esto no era nada nuevo para él.
Jorge Andrés dejó la línea abierta mientras conducía desde su fundo hacia la casa de Werner Luchsinger y Vivianne Mackay, de manera que si le sucedía algo, si lo atacaban al llegar, si lo amenazaban, si le disparaban, Germán lo iba a saber. Pero lo que escuchó a través del celular no fueron gritos de auxilio de su primo, sino que de desesperación.
-!Dónde están¡, !dónde están¡
Germán Luchsinger llegó pocos minutos después y lo que vio todavía no se lo saca de la cabeza: la casa de sus tíos ardiendo y a su primo pidiéndole ayuda para buscar a sus padres. "Jorge Andrés había llamado a sus papás, pero ellos no contestaban. Así que nos pusimos a buscar por todo el sector con al esperanza de que hubiesen arrancado y estuvieran por allí en shock. Después de más de dos horas no nos quedó más que pensar que estaban dentro de la casa", dice hoy, a una semana del atentado que terminó con la muerte del matrimonio Luchsinger Mackay, obligó al gobierno a pensar en declarar Estado de Excepción y puso a todos los agricultores de La Araucanía en pie de guerra.
Sebastián Luchsinger Bram y Bárbara Marti Dürst -nacidos en Engi, Suiza-, llegaron a Chile en 1883 junto a sus nueve hijos de entre 5 y 21 años. Atraída por la "Mesopotamia de América del Sur", como se difundía en Europa a la recién pacificada Araucanía, la familia arribó a Talcahuano y fue asignada a la colonia de Quechereguas, en Traiguén. Diez años después obtuvo el título definitivo por parte del Estado de Chile.
Adam, uno de los hijos del matrimonio, encontraba que las tierras eran difíciles de trabajar, así que vendió las hectáreas que le correspondían y emigró a Temuco en 1895, donde se instaló como comerciante. Tenía carretones de transporte, con los que abastecía de vinos y licores a los colonos suizos de la zona. Casado con Margarita Ruff Studer tuvo 11 hijos. En 1909 compró 60 hectáreas en Vilcún a un colono alemán y se trasladó con su familia al campo para vivir de la agricultura. Fue el primero de varios fundos que Adam adquirió después. La Comunidad Luchsinger Hermanos -formada por sus hijos- llegó a tener 1.100 hectáreas.
En 1954 la...
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