Patriotismo constitucional: ¿Una opción para Chile?
El 27 de agosto de 1980, en Santiago, en el Teatro Caupolicán, dos semanas antes del plebiscito para ratificar o rechazar la nueva Constitución, el filósofo Jorge Millas dijo: "De aprobarse lo que el gobierno quiere nacerá el orden aparente y compulsivo de unas instituciones sin base moral, por haber sido instauradas sin auténtico consentimiento ciudadano [...]. El problema de la Nueva Constitución seguirá siendo la gran tarea histórica de los chilenos libres".Cuarenta años después, en democracia, con el orden político y social en crisis, en el plebiscito del 25 de octubre de 2020 el 78,28% de los votantes aprobó la redacción de una nueva Constitución; además, el 79% eligió que el nuevo texto lo escribiera una Convención Constitucional, con sus 155 miembros nominados popularmente.El pluralismo caracteriza a las sociedades, la diferencia, a la política, han dicho filósofos como John Rawls y Hannah Arendt.Este domingo asume la Convención, organismo con paridad de género y representación de las primeras naciones, con diversidad social y política. La pregunta es si este proceso puede aplanar o empezar a aplanar el terreno en el que construir un orden no a pesar de las diferencias, sino con ellas.Una cuestión alemanaEl asunto era peliagudo, según reseña la Enciclopedia de filosofía de Stanford: cómo hablar de patriotismo en Alemania luego de los crímenes del nacionalsocialismo. En 1959, el politólogo Dolf Sternberger propuso lo que parecía una paradoja, una patria sin nación: "La patria es la 'república', que nosotros mismos creamos. La patria es la Constitución, a la que damos vida. La patria es la libertad, de la que disfrutamos verdaderamente solo cuando nosotros mismos la promovemos, hacemos uso de ella y la cuidamos", dijo.En 1979, en el trigésimo aniversario de la República Federal, la Alemania occidental, Sternberger le dio nombre a la patria entendida en esos términos: "Patriotismo constitucional".En 1986 el asunto volvió a ser tema. En medio del debate sobre cómo construir una autoconciencia y autoconfianza nacional en Alemania, comenzó un revisionismo del pasado nazi. Algunos decían que había que pasar página y dejar de culpar a los alemanes. El filósofo y sociólogo Jürgen Habermas respondió que no, que esa autoconciencia y esa autoconfianza nacional se podían "obtener únicamente de las mejores tradiciones de nuestra historia asumida no a ciegas, sino críticamente".Una conciencia crítica, explicó Habermas, según la biografía que le dedicó Stefan Müller-Doohm, indica que se ha aprendido del pasado y que se ha elaborado una identidad "posconvencional", es decir, asociada a un patriotismo que solo cabe pensar como un "patriotismo constitucional". Ese, según el filósofo, es el logro de Alemania tras la Segunda Guerra Mundial; es a ese logro al que hay que mirar con orgullo: "Un enlace con principios constitucionales universales arraigado en convicciones".En 1989 cayó el Muro de...
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