Partido Popular de Rajoy gana las elecciones locales en España, pero sufre fuerte desgaste
En el principal termómetro de las elecciones generales de fin de año en España, el Partido Popular (PP, centroderecha) del Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ganó ayer los comicios municipales y autonómicos, pero sufrió un fuerte desgaste que le hace perder mayorías absolutas que tenía en numerosas ciudades y regiones. La dispersión del voto abre una complicada etapa de negociaciones, en la cual los partidos emergentes Podemos (izquierda) y Ciudadanos (centroderecha) aparecen como decisivos para crear coaliciones, especialmente el primero, que incluso podría alcanzar importantes gobiernos locales en alianza con el Partido Socialista (PSOE, centroizquierda).
Según resultados oficiales de las elecciones municipales, el PP obtuvo a nivel nacional el 27% de los votos, seguido por el PSOE, que consiguió el 25% de los sufragios, mientras que Ciudadanos se posiciona como tercera fuerza nacional con el 6,5% y supera a Izquierda Unida (4,7%) y a Convergencia i Unió (3%). Podemos no se puede evaluar por sí solo, ya que no participó por su nombre, sino que integró coaliciones en distintas ciudades.
Aunque se ratificó como la primera fuerza política, el PP -que hasta ahora gobernaba con comodidad en la mayoría de las regiones y ayuntamientos- cayó cerca de 10 puntos porcentuales respecto de las elecciones de 2011, lo que representa su peor desempeño en 20 años. El PSOE bajó su votación en dos puntos porcentuales, lo que atribuyó principalmente a que ya había amortiguado su caída en las pasadas elecciones, cuando había retrocedido 19 puntos respecto de la anterior contienda. En total, el PP perdió más 2.600.000 votos, y el PSOE unos 850.000. La noche electoral certificó también el hundimiento de Izquierda Unida, una coalición nucleada en torno a los comunistas, así como el de los centristas de UPyD, cuyos votos han escapado en dirección a Ciudadanos.
Pese a que en España se tiende a privilegiar las primeras mayorías, en un escenario donde el tradicional bipartidismo entre el PP y el PSOE ha cedido terreno debido a la irrupción de Podemos y Ciudadanos, la ecuación se complica mucho más. Según analistas, la pérdida de las mayorías absolutas podría hacer que el PP dejara de controlar los ayuntamientos de grandes ciudades como Madrid, Valencia y Sevilla, entre otras, que pasarían a manos de la izquierda.
En el caso de Madrid, el PP liderado por Esperanza Aguirre consiguió una estrecha victoria con 21 concejales, frente a los 20 de la coalición Ahora Madrid, que es apoyada por Podemos. Aunque todavía tiene la opción de intentar una alianza con Ciudadanos, se daba prácticamente por hecho que Ahora Madrid...
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