Papa envía a Chile a arzobispo de Malta para recabar información sobre el caso de Barros
"A propósito de algunas informaciones recientes con respecto al caso de monseñor Juan de la Cruz Barros Madrid, obispo de Osorno, el Santo Padre ha dispuesto que monseñor Charles J. Scicluna, arzobispo de Malta y presidente del Colegio para el examen de los recursos en la Sesión Ordinaria de la Congregación para la Doctrina de la Fe, se desplace a Santiago de Chile para escuchar a quienes han manifestado la voluntad de dar a conocer los elementos que poseen".
Aunque no fue planteado explícitamente, no quedó duda de que monseñor Scicluna -uno de los mayores expertos en la investigación de abusos sexuales en el Vaticano y quien ha sido promotor de Justicia de la Congregación para la Doctrina de la Fe- viene a Santiago a recabar información y a entrevistarse, entre otros, con las víctimas del sacerdote Fernando Karadima, quienes acusan al obispo Barros de encubrimiento de esos abusos.
El Papa, durante su visita a Chile, había planteado ante las acusaciones sobre Barros: "El día que me traigan una prueba, voy a hablar. No hay una sola prueba en contra, todo es calumnia". Sus palabras generaron críticas de parte de las víctimas de Karadima.
Luego, durante su regreso a Roma, señaló que su "expresión no fue feliz". "La palabra prueba es la que me traicionó, yo hablaría de evidencia. La palabra prueba ha herido a tantos abusados (...) Sé cuánto sufren y sentir que el Papa les dice en su cara: 'tráiganme una carta' es una cachetada.", dijo. Finalmente, planteó: "Barros seguirá ahí si no encuentro forma de condenarlo, yo no puedo condenarlo si no hay, no digo pruebas, evidencias".
A Scicluna (58 años) le correspondió investigar en México la situación a Marcial Maciel, líder de los Legionarios de Cristo, sobre quien pesaban una serie de acusaciones de abuso sexual.
En una entrevista realizada en 2010, Scicluna explicaba qué sucedía si un sacerdote era acusado de un delitum gravius, como los abusos sexuales. "Si la acusación es verosímil, el obispo tiene la obligación de investigar tanto la credibilidad de la denuncia como el objeto de la misma. Y si el resultado de la investigación previa es atendible, el obispo ya no tiene facultad de disponer de la materia y debe remitir el caso a nuestra Congregación (de la Doctrina de la Fe), donde será tratado por la oficina disciplinaria", señalaba.
Reacciones
Ayer la noticia causó impacto inmediato. Pese a que Juan Barros no se pronunció, el obispado de Osorno informó a través de un comunicado que "el obispo se...
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