Papa elogia el 'esfuerzo' de la Iglesia Católica y critica la 'resistencia al cambio' en Cuba - 22 de Septiembre de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 582913482

Papa elogia el 'esfuerzo' de la Iglesia Católica y critica la 'resistencia al cambio' en Cuba

A la misa campal realizada en la Plaza de la Revolución de Holguín, la tercera ciudad del país, asistió el Presidente Raúl Castro, cumpliendo con su promesa de no faltar a ninguna liturgia.

El oficio religioso coincidió con la festividad católica de San Mateo, uno de los cuatro evangelistas, lo que Francisco destacó como "la historia de una conversión" al cristianismo.

El Papa decidió hacer una escala en Holguín porque es la capital de la región en la que desembarcó Cristóbal Colón en 1492 y, con él, arribó la cruz de la evangelización, llevada por los misioneros españoles. Por eso hoy es considerada la cuna de la cristiandad en Cuba.

En su homilía, Francisco señaló que Jesús "nos invita a ir lentamente superando nuestros preconceptos, nuestras resistencias al cambio de los demás e incluso de nosotros mismos. Su amor... nos estimula a mirar más allá, a no quedarnos en las apariencias o en lo políticamente correcto".

El Papa conoce perfectamente la realidad de la isla y "la ilumina con el Evangelio para que sean los cubanos quienes, reconociéndose hijos de Dios, impregnen la sociedad con los valores y principios cristianos de igualdad, de respeto a la dignidad humana y de libertad", señala a "El Mercurio" Eduardo Berdejo, periodista especializado en Iglesia del sitio católico ACI Prensa.

"Como han enseñado y enseñan los pontífices: el primer cambio se da en el corazón del hombre y a partir de ahí se transforma la sociedad", afirma.

Sacrificio de la Iglesia

Luego, el Papa tuvo palabras de elogio para el "esfuerzo y sacrificio" que hace la Iglesia Católica para llevar la fe en la isla, hasta 1992 con un Estado constitucionalmente ateo.

Tras el triunfo de la revolución encabezada por Fidel Castro, en 1959, gran número de sacerdotes, monjas y congregaciones religiosas tuvieron que abandonar la isla y sus bienes fueron confiscados. Esto significó que no se construyeran más iglesias en Cuba, pero no impidió que la fe se divulgara a través de las llamadas "casas de misión", viviendas que los creyentes prestaban para recibir a sacerdotes o simplemente para que otros miembros de la comunidad pudieran orar.

Aunque no fueron bien vistas por el régimen, nunca se las prohibió. Hoy en la isla hay 2.600 casas de misión, frente a las 700 parroquias existentes, según...

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