Cómo una panadería y una fábrica de calcetines le ganaron a la modernidad
Los 130 años de San Camilo vendiendo pan y pastelesEn sus 35 locales venden más de 300 mil kilos de pan al mes:San Camilo, el nombre del patrón de los enfermos, fue el que eligió la familia Besoaín para bautizar en 1884 su panadería que estaba ubicada en San Pablo con Matucana, en pleno barrio Yungay. En 1910 la compró la familia catalana Ferrer y en 1921 se integró la familia Ferrán, del mismo origen, quienes desde 2011 manejan el 100% de la compañía.
No saben exactamente por qué la bautizaron así. Pero la leyenda cuenta que en las cercanías había un hospital y que tras un incendio la imagen del santo apareció en la panadería.
Como sea que haya ocurrido, el nombre les ha traído suerte porque San Camilo cumplió 130 años de existencia y cuenta con 35 locales repartidos en once comunas de la capital.
El gerente general, Alberto Ferrán y su primo René Alonso Ferrán, gerente de administración y finanzas, forman parte de la tercera generación de la familia en la compañía. Desde el directorio participan el padre de Alberto, Cayetano Ferrán, y el hermano de este, Antonio Ferrán.
Alberto Ferrán cuenta que se ha esforzado por mantener vigentes los albores de esta panadería y pastelería, que para él es mucho más que las más de cien variedades de pan que comercializan y que suman más de 300 mil kilos vendidos al mes.
En las paredes de su oficina tiene pegada una línea de tiempo donde cuelgan las fotos del primer carretón repartidor de pan que era tirado por caballos, de la burrita San Camilo, y de las camionetas Taurus con que se entregaba el pan en las casas en los años 60.
También está la foto de la primera fábrica que era fuente de soda, panadería y pastelería, y orgulloso muestra la imagen del primer equipo de fútbol de San Camilo, en 1935. "Esta me gusta porque te habla del espíritu de trabajo en equipo que nos caracteriza", dice Alberto Ferrán.
La etapa de crecimiento
En 1936 San Camilo abrió su segundo local en Alameda, esquina San Alfonso.
Pero, cuenta Alberto, el período de gran expansión vino a partir de 1950, cuando construyeron la actual fábrica en la misma esquina donde estaba la panadería original.
Con 7 mil metros cuadrados de planta entre la fábrica y la sala de ventas, el complejo alberga la sección administrativa, además de la panadería, bollería, logística, distribución y empaque de los productos envasados, como galletas y panes de pascua.
Esa inversión también involucró mecanizar varios procesos, trayendo maquinaria europea para...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba