Palabras. . . tan solo palabras - 25 de Julio de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 579082330

Palabras. . . tan solo palabras

Nada de ello ocurrió. La cuenta estuvo caracterizada por un tibio reconocimiento de culpas, ninguna acción inmediata y reparatoria y el anuncio de medidas correctivas insignificantes. Si bien solo el 9% de los chilenos confían en nuestro Parlamento (CEP, 2015), nuestros legisladores parecen no enterarse de que la respuesta a la crisis de la que son protagonistas requiere de radicalidad. Así, el diputado Núñez, mostrando signos evidentes de disociación -que la psiquiatría define como el proceso en el cual la conciencia o la percepción del ambiente dejan de operar-, declaró en su discurso que "la ciudadanía sigue confiando en nosotros". Luego, el senador Walker iba bien encaminado al afirmar que "muchas veces no hemos estado a la altura de lo que la ciudadanía esperaba de nosotros", hasta que decidió matizar sus propias declaraciones, y en vez de hacer un mea culpa contundente, señaló que "la crisis no es exclusiva de la política ni el Parlamento, sino también de las grandes empresas y las instituciones en general. "Para Freud, el atribuir nuestros defectos también a otros es una de las respuestas narcisistas clásicas que permiten atenuar el daño a la autoimagen. Sospecho que esta admiración de nuestros parlamentarios por sí mismos y sus cualidades, derivadas de haber sido "elegidos", ser personas públicas, con presencia en los medios y permanentemente rodeadas de los signos del poder, ha causado estragos en su capacidad de ver la realidad. Mayor aun es su incapacidad para pedir perdón, y ni hablar de su ineptitud para actuar decididamente en pos de la recuperación de la confianza de quienes alguna vez, en una urna, la depositaron en ellos.

Nuestros parlamentarios deberían saber, como nos enseñó el premio Nobel de Economía Daniel Kanheman, que cuando la confianza en una relación se ha perdido, se necesitan al menos cinco eventos positivos para recién volver el equilibrio inicial de dicha relación. Desde luego, muchas más pruebas positivas y significativas se requerirán para levantar ese paupérrimo 9% de legitimidad ciudadana que hoy tienen los legisladores. Por eso las cacareadas "reformas radicales" por parte de los presidentes de ambas Cámaras son tan insignificantes. No se puede revertir la desconfianza haciendo gárgaras ni planteando compromisos etéreos como el "dar el ejemplo y no hacerse parte nunca más de las malas prácticas que socavan la democracia" (Núñez) o...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR