Oskar Kokoschka: vigencia de un expresionista radical - 9 de Abril de 2023 - El Mercurio - Noticias - VLEX 928081609

Oskar Kokoschka: vigencia de un expresionista radical

El artista y poeta vienés Oskar Kokoschka (1886-1980) pintó alegorías extremas sobre el ambiente previo y el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial. Una de sus pinturas más irreverentes fue "El huevo rojo", 1940-41: dibujó una mesa donde los comensales son Hitler, quien aparece vociferando, mientras Mussolini permanece atónito frente a un huevo rojo alrededor del cual rondan "dos ratas veloces en su codicia". Bajo la mesa un gran gato descansa (simbolizando a "Francia que violó su pacto al firmar los acuerdos de Munich de 1938, que aceptaban la anexión de los Sudetes checoslovacos a Alemania") y un poco más atrás hay un león coronado que tiene en la cola el signo de la libra esterlina, aludiendo a Gran Bretaña. Se observa, a lo lejos, Praga en llamas. Kokoschka buscó denunciar en esa pintura alegórica "no solo a Italia y Alemania como culpables del ascenso del fascismo, sino también a Francia y a Gran Bretaña por su complacencia con los acuerdos de Múnich", firmados en 1938. Y pintó ese lienzo con una pincelada vibrante y estremecedora.Este artista lúcido y rebelde había iniciado su carrera en la Viena imperial, en tiempos en que esa ciudad bullía de creatividad: cuando nacía el psicoanálisis de Freud, vivía uno de los creadores de la filosofía analítica, Ludwig Wittgenstein; destacaba la literatura de Arthur Schnitzler, y los pintores modernistas Klimt y Schiele, entre muchos otros. Pero Kokoschka -aunque alimentado por ese rico mundo cultural- se movía para su arte y escritura más por el dolor y sus experiencias desgarradoras. Y se transformó en uno de los expresionistas más radicales. Pasó a integrar después la temida lista de los "artistas degenerados" perseguidos por el nazismo.Dibujó, pintó y escribió sobre su dolor ante el hambre, la crueldad del mundo y la guerra. Y fue consecuente donando valiosas obras de su autoría a entidades como la Cruz Roja y entidades de acogida de niños afectados por el hambre durante la guerra. Tenía, además, una singular sensibilidad religiosa, le han llamado "pintor de almas". El tema de la muerte era una constante, como lo fue en otros precursores del expresionismo como el belga James Ensor.Pero el tiempo fue instalando una capa de silencio en torno a la obra maestra de Kokoschka, y a su personalidad. El Museo Guggenheim de Bilbao y el Museo de Arte Moderno de París decidieron revisitar su historia y exponer más de 160 obras que dibujan su asombrosa trayectoria que constituye un testimonio de su...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR