El oro de Juan Fernández - 16 de Septiembre de 2018 - El Mercurio - Noticias - VLEX 738513269

El oro de Juan Fernández

L a captura de la langosta ha sido el sustento de los habitantes de la isla Robinson Crusoe, en el archipiélago Juan Fernández, desde hace 125 años. Una pesquería cerrada, que solo se permite a los habitantes de la isla, respetuosa de las tallas de cada ejemplar que se extrae y la certificación internacional de la Marine Stewardship Council (MSC), que da fe de su sustentabilidad, le han permitido no solo mejores precios, sino también la modernización de sus artes de pesca y elevar el estándar de vida de toda la isla.Es el "oro del mar", dicen los pescadores, gracias al cual se ganan el sustento y capean los momentos difíciles.Un oro que, paradójicamente, comenzó a brillar especialmente luego del maremoto que el 27 de febrero de 2010 dejó al poblado en ruinas. Lo resume Pablo Manríquez, ingeniero en pesca, investigador de la Universidad de Concepción y oriundo de la isla.-Pasó algo que todavía no nos explicamos. Ese año hubo mayor abundancia de langostas, luego se ampliaron las exportaciones a China y las cosas mejoraron. Hoy el precio de la langosta puesta en orilla ha aumentado en más del doble.Si antes del maremoto se extraían 80 mil langostas, en los años siguientes los desembarques subieron a 120 mil unidades, aunque la última temporada experimentó una caída a 65 mil.Manríquez acota que lo más importante no es el tamaño de la captura, sino el precio, que en el mismo lapso pasó de 8 mil a 17 mil pesos la unidad. Eso ha significado que hoy el pescador gane más del doble de lo que recibía hace una década.-Hace tres años, la de Juan Fernández llegó a ser la cuarta más cara del mundo. Hoy los chinos compran entre el 80 y 90 por ciento de las langostas de la isla, porque les gustan las de aguas frías, de Nueva Zelandia, Sudáfrica, Australia y Chile.Parte del éxito se debe a que este tipo de langostas soporta bien los largos viajes para llegar vivas al destinatario final. Para ello son enviadas a Valparaíso en avión, donde permanecen al menos cuatro días en viveros, para ser reembarcadas en cajas de material aislante y protegidas con paja y gel, hasta China. El exportador Óscar Ávila dice que si no hay problemas de conexión, "entre la salida del aeropuerto de Santiago y su recepción en China pasan entre 46 y 50 horas, y llegan todas vivas. Si se demora más, muere al menos la mitad y perdemos unos US$ 30 mil por tonelada".Leopoldo González no solo es el alcalde. También es pescador. Recuerda que la pesca significa, al menos, el 80 por ciento de...

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