Olas en la noche - 14 de Febrero de 2016 - El Mercurio - Noticias - VLEX 593565066

Olas en la noche

Cuando cae el sol en el Balneario Municipal de Antofagasta, a eso de las nueve de la noche, comienza el recambio . Mientras los bañistas que han estado todo el día bajo los implacables rayos solares se retiran a sus casas, los antofagastinos que recién salen del trabajo llegan con su toalla a tenderse sobre la arena. Algunos arman un improvisado picnic con vista al mar, otros compiten por nadar hasta la balsa que está en medio de la playa artificial. Como Yanicel, son cientos los antofagastinos que aprovechan la noche para disfrutar del agua, toda una tradición en el norte. En cambio, para la familia boliviana Añez Molina, que llevan un año viviendo en la ciudad, es toda una novedad.

-Primera vez que venimos a bañarnos de noche, el agua es muy tibia.

El principal balneario local está rodeado de un paseo peatonal costero, restaurantes y el Parque Croacia, que le dan vida al sector hasta pasada la medianoche . Incluso, en los mismos roqueríos se puede pescar. "En la noche vienen familias completas", acota Ricardo Rojas, concesionario del Balneario Municipal. Otros no tienen que caminar mucho para mojarse a la luz de la luna, porque convierten la playa en un improvisado hogar.

Una veintena de familias organizadas en la "Asociación de Campistas de Antofagasta" permanece todo el verano en Huáscar, balneario ubicado a 3 kilómetros al sur de la ciudad . Ahí, en la orilla, crean un verdadero pueblo de carpas autorizado por la Gobernación Marítima, con su respectivas actividades familiares e improvisados almacenes de abarrotes. Elsy Espinoza, presidenta de la agrupación que organiza la recolección de cuotas de los vecinos, lleva 40 años repitiendo esa rutina. A principios de diciembre cierra la puerta de su casa y se va a pasar Navidad y Año Nuevo en Huáscar. El almuerzo está ahí mismo: los hombres de la comunidad salen a pescar en la mañana y regresan con los peces listos para freír. En la comunidad playera también realizan sus propias celebraciones. A fines de enero, un vecino presta una de sus carpas para festejar el aniversario desde que se fundó la agrupación. Este año hubo competencias de cueca, confección de traje ecológico y platos típicos. Elsy dice que son felices así.

-Los niños disfrutan a concho. Todos los días juegan a la pelota, inventan cualquier cosa para entretenerse.

Los baños nocturnos no son patrimonio exclusivo de Antofagasta. En verano, Luisa Villalobos, generalmente, llega a su turno de tarde en una céntrica librería de Arica...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR