'Nunca pensé en renunciar, me sentí respaldada por el Presidente y el comité político'
"Un proceso de instalación, no exento de dificultad". Así define Izkia Siches los 43 días que lleva a cargo del gabinete del Presidente Boric. Dice que el país vive "un momento de alta complejidad" y, más adelante, agrega: "Quizás de los más complejos desde el retorno a la democracia".No menciona directamente los tropiezos que la han mantenido en el ojo del huracán, desde su frustrada visita a Temucuicui, contradicciones con su subsecretario, su impasse con el Poder Judicial y el bochornoso error cuando denunció en el Congreso un falso vuelo con venezolanos deportados.Con todo, admite que una cartera como Interior requiere de "serenidad y templanza", sin "perder parte de mi esencia", la misma que fue decisiva en el triunfo de segunda vuelta.La ministra rompe el silencio de estas semanas, para marcar terreno en la nueva fase que el Gobierno quiere arrancar.-El Presidente habló de "turbulencias", ¿por qué ha costado tanto la instalación?, ¿falta experiencia?-No, más que nada, un país que está viviendo procesos complejos. Eso obliga a resultados muy inmediatos, todos estábamos muy interesados por que llegara el 11 de marzo.-¿Demasiada ansiedad?-Más que eso, mucha voluntad de ministros y ministras por mostrar trabajo muy rápido. Y no es sencillo, las reformas, procesos de transformación y conflictos centenarios no se van a resolver de la noche a la mañana. Tenemos que transmitirle a la ciudadanía cuáles son los problemas más estructurales, las soluciones de fondo y cómo hacemos un trabajo colaborativo.-Su cercanía y espontaneidad, decisivas en la campaña, ¿le han jugado en contra?-Hay parte de mi esencia que no puedo perder y que me permite mantenerme conectada con las necesidades de las personas. Pero también se requiere transmitir la serenidad y templanza que demanda el cargo.-¿Fue arriesgado apostar al protagonismo?-Acompañar este Gobierno ha sido uno de los desafíos más hermosos e interesantes que he tomado en mi vida, sin cálculos pequeños, sino buscando poner todas las capacidades y credibilidad, también de los distintos ministros y ministras, para que avance el programa.-¿Quedó dañado su liderazgo político?-Estamos en un período muy inicial para hacer balances. Creo que el Presidente definió nominarme como ministra del Interior porque hoy más que nunca se requiere construir políticas de Estado y para ello es necesario flexibilidad y ánimo de diálogo con todos los sectores. Ello no ha cambiado. He podido conversar con exministros del Interior y he encontrado voces que, más que pretender dar cátedra, empatizan con el difícil momento que atraviesa el país, quizás el más complejo desde el retorno a la democracia: crisis social y económica, crisis humanitaria en el norte, el aumento exponencial de la violencia en el sur, el aumento de los homicidios y el crimen organizado.-¿Con qué ministros...
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