Nuevos hábitos culturales : las tendencias que deja la pandemia
No hay aún estudios definitivos sobre el impacto de la pandemia en los hábitos culturales, "pero existen tendencias globales que se constatan también -con matices- en Chile", explica Javier Ibacache. Crítico de artes escénicas y especialista en estudio de audiencias, Ibacache es el jefe de la Unidad de Programación y Públicos del Ministerio de las Culturas y esta semana participó en un seminario virtual sobre este tema organizado por el Teatro Mayor de Bogotá.Según Ibacache, "la forzosa digitalización aceleró tendencias que ya se estaban dando. También nuevas modalidades de relacionarse con los contenidos que probablemente impacten a futuro en actividades presenciales". Un público más empoderado, voluble y participativo parece ser una de las huellas de la pandemia. Lograr atraer a este espectador pospandemia con contenidos adecuados y participativos parece ser uno de los desafíos que hoy enfrentan las instituciones culturales.Por otra parte, aún se detecta una merma importante en el público que asiste a espectáculos presenciales, lo que se nota, por ejemplo, en la exigua concurrencia a las salas de cine en Chile y el mundo. Y si bien la pandemia ha acercado a nuevos públicos a la cultura a través de formatos digitales, "también ha dejado en evidencia la brecha digital, que es -en rigor- una brecha cultural, que excluye a un porcentaje importante de la población de las nuevas prácticas", explica Javier Ibacache.Para retratar las tendencias que comienzan a dibujarse, conversamos con especialistas chilenos, que describen siete tendencias o fenómenos que habrá que observar con atención.sigue en E 2 Un espectador crítico y volátilTras la pandemia, se estaría dibujando el perfil de un "nuevo espectador", afirman los entendidos. Según Javier Ibacache, se percibe "la consolidación de un perfil de espectador crítico, participativo y volátil. La exposición creciente a pantallas se ha traducido en una reducción cada vez más significativa en los tiempos de atención de las personas. A la vez, la masificación de plataformas ha fortalecido en las audiencias una autonomía en la toma de decisiones", explica el jefe de la Unidad de Programación y Públicos del Ministerio de las Culturas.Desde el GAM, Felipe Mella acota que "estamos notando públicos más concentrados en el segmento adulto-joven y con mayores ganas de vincularse en modelos más participativos. Se buscan en general experiencias que incorporen las necesidades y miradas de la contingencia, así como procesos con más interacciones".Es decir, habría un "empoderamiento" en los públicos, reflejo -también- de las demandas de mayor participación que se viven en la sociedad. "La diversificación de opciones de acceso a contenidos que se generaron en 2020 y 2021 han fortalecido la conformación de comunidades digitales y hoy prima un enfoque de micro segmentación por gustos de los espectadores", reflexiona Ibacache. A su juicio, los contenidos que se programen se convierten en un factor determinante para movilizar a los públicos, más que antes de la pandemia.Este nuevo perfil del "espectador pospandemia" se caracterizaría por incluir, sobre todo, a jóvenes y adultos hasta los 40 años. A partir de ahí, el panorama se torna más complejo a la hora de retornar a lo presencial.Los desafíos de los conciertos musicalesLa actividad musical ha tenido que adaptarse a presentaciones a través de las pantallas y a los reducidos aforos presenciales. La primera fue la solución más inmediata al comenzar la pandemia y se extiende hasta hoy. El Teatro Municipal de Santiago, el de Las Condes y el CEAC se han aventurado a transmitir sus conciertos por streaming , acompañando sus paulatinas reaperturas. Rodrigo Osorio, presidente de la Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales...
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