Nuevo nombre, sistema antiguo - 19 de Marzo de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 773072801

Nuevo nombre, sistema antiguo

Red ha pasado a llamarse ahora el sistema de transporte público de Santiago, según acaba de anunciar el Gobierno. La nueva denominación apunta a dejar atrás las asociaciones negativas que inevitablemente suscita el antiguo nombre de Transantiago, enfatizando así que el sistema que resultará de la futura licitación de operadores, proveedores de flota y otros servicios significará un cambio radical frente al esquema existente.El problema de este anuncio radica, por supuesto, en que el proceso de modificación de nombre -aunque se ha dicho que tendrá una implementación gradual- se ha iniciado antes de que ocurran los cambios que definirán al nuevo sistema. Por ahora, se trata de una nueva imagen corporativa para un sistema antiguo. En efecto, el único cambio hoy observable en el transporte de superficie es que un porcentaje inferior al 15% de los buses ha sido reemplazado por vehículos eléctricos o diésel más modernos. No es claro, por lo tanto, que este haya sido el momento adecuado para dar este paso; al contrario, el adelantamiento puede dañar innecesariamente la credibilidad ciudadana en la reforma que se lleva adelante en este ámbito. Esto, pues si bien los cambios prometidos son lo suficientemente importantes para que el sistema merezca entonces una denominación nueva, sin connotaciones negativas, falta probablemente más de un año para que entre en servicio ese nuevo esquema de transporte público. Por ahora, deben aún ingresar a Contraloría las bases de las licitaciones, las que seguramente requerirán modificaciones y correcciones antes de ser aprobadas. Posteriormente deberán ser estudiadas por los interesados, los que tendrán que definir sus ofertas. Entre ellas serán elegidas las mejores, decisión que también deberá ser aprobada por Contraloría, para finalmente emitir los decretos que adjudicarán los contratos. Entonces, las empresas deberán constituirse, obtener financiamiento y comenzar a operar.Los cambios están diseñados para corregir varios problemas que existen en el Transantiago. Una de las principales dificultades del modelo actual es el tamaño de los operadores. Dado que son tan grandes, es imposible cambiarlos sin producir un período de desajuste en gran parte de la ciudad. Eso genera condiciones que desincentivan el buen servicio, pues tampoco existen formas efectivas de sanción, ya...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR