El nuevo gobierno islamista: de Guantánamo al palacio presidencial - 17 de Agosto de 2021 - El Mercurio - Noticias - VLEX 874489671

El nuevo gobierno islamista: de Guantánamo al palacio presidencial

El viejo nuevo talibán está de vuelta. Visten las mismas túnicas blanquecinas, lucen las mismas barbas largas bajo la barbilla y, pese a una ofensiva de terciopelo por la que prometen no represaliar a sus enemigos, no todos tienen claro hasta qué punto los talibanes de hoy son distintos de los de ayer. Porque son los mismos, salvo aquellos a los que EE.UU. fulminó durante su "guerra al terrorismo". A algunos de los que quedan al frente, de hecho, Washington los salvó expresamente para ponerse a negociar con ellos.Es el caso de Abdul Ghani Baradar, mulá Baradar o, traducido, "mulá Hermano". Si el clérigo Haibatullah Akhundzada ejerce de líder del movimiento (cargo conseguido a base de ganarse la lealtad del mismo líder de Al Qaeda), Baradar, director de la oficina política talibán y negociador jefe durante el proceso intra afgano de diálogo, ejerce de rostro amable. Fue suyo el primer discurso del grupo tras la fuga del país del ya expresidente Ashraf Ghani."En este momento nos enfrentamos a un test porque ahora somos responsables de la seguridad del pueblo", declaró Baradar el domingo por la noche, en unas palabras grabadas de antemano. Se desconoce su paradero en estos momentos, aunque varios medios locales e internacionales lo situaban de camino a Kabul desde Doha, donde, según la cadena afgana Tolo News, siguen las conversaciones políticas para conformar un gobierno para el futuro de Afganistán.Entretanto, en la capital afgana, hombres armados tomaban las dependencias del Parlamento y del palacio presidencial. Algunos se sentaban sobre suntuosas alfombras; otros se dejaban caer sobre el lujoso mobiliario. Uno de ellos, cantando victoria, aseguraba a la cadena Al Jazeera que había pasado cuatro años detenido en la bahía de Guantánamo. Allí construyó EE.UU. una prisión para presuntos combatientes talibanes que, a la postre, se convertiría en monumento a las violaciones del convenio de Ginebra.Con el Ejecutivo en desbandada, líderes de la escena política de los últimos años, como el sanguinario exseñor de la guerra Gulbuddin Hekmatyar, y el expresidente y líder muyaidín tolerado por EE.UU. Hamid Karzai, se posicionaban en un...

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