El nuevo centro de reclusión que está listo para convertirse en una empresa - 31 de Diciembre de 2011 - El Mercurio - Noticias - VLEX 342258586

El nuevo centro de reclusión que está listo para convertirse en una empresa

Concesionada a la empresa Sodexo, que también administra las cárceles de Alto Hospicio (Tarapacá), La Serena (Coquimbo) y Rancagua (O'Higgins), los planes son avanzar desde este penal en la experiencia de masificar la incorporación de internos a tareas remuneradas.

En los cuatro centros laboran 509 personas, entre hombres y mujeres. En la recién inaugurada cárcel ya hay contratados 54 internos, que trabajan en tareas de lavandería, servicios, alimentación, entre otros oficios.

Según explica Patricio Caro, gerente de Reinserción Social de la concesionaria, perciben un salario mínimo de $ 182 mil, más horas extras, lo que les permite recibir hasta $ 220 mil al mes. Tienen derecho a vacaciones, licencia médica y las prestaciones previsionales que señala la ley.

¿Diferencias? Si toman asueto no significa que saldrán en libertad, a no ser que gocen de algún beneficio intrapenitenciario.

Tampoco reciben el sueldo completo. Patricio Ruiz, jefe de Área de Trabajo y Capacitación de Gendarmería, explica que a fin de mes al interno se le entrega directamente entre una o dos UTM (entre $ 39.021 y $ 78.042, según valor a diciembre). Otro 15% se deposita en una libreta de ahorro para que tengan dinero al momento de egresar; y el saldo es de libre disposición.

Son buenos trabajadores, dice Osvaldo Alarcón, de Sodexo Biobío. "Aprenden rápido, y como la mayoría no había trabajado nunca absorben todo lo que se les enseña", apunta.

El nuevo CPP de Concepción es de máxima seguridad, para condenados con alto compromiso delictual. Pero de los 54 contratados, sólo dos fueron "despedidos" por mala conducta. "Eso comprueba que la oportunidad laboral, más el incentivo que da el aprender un oficio, mejora ostensiblemente la conducta de los internos", explica Álvaro Sotelo, coordinador de Reinserción de Gendarmería.

Y hay más cifras. En los Centros de Educación y Trabajo Semiabiertos, donde los internos trabajan con ingresos promedio superiores a los $ 100 mil mensual, reciben atención psicológica, capacitación y viven en mejores condiciones, un estudio de la institución arrojó que la reincidencia es de sólo 13,2%.

¿Qué viene ahora? Hay planes de...

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