Las nuevas acusaciones contra Patricio Hales - 11 de Noviembre de 2017 - El Mercurio - Noticias - VLEX 696403997

Las nuevas acusaciones contra Patricio Hales

-Fue muy potente, porque personas que no se conocían, que nunca se habían visto en la vida, empezaron a contar cosas que habían vivido con Hales y fue casi como la experiencia de un grupo de sobrevivientes de alguna catástrofe -describe José Andrés Murillo, que estuvo presente.

Pese a que era para aportar mayores antecedentes en el sumario que la Cancillería había iniciado para investigar a Hales -proceso del cual finalmente salió absuelto-, esa reunión fue el punto de inicio de una acusación por presuntos abusos sexuales y amenazas contra el exembajador de parte de María Eugenia Soto (38): una nana que trabajó con Patricio Hales y su esposa, María de los Ángeles Swinburn, entre 2003 y 2012, cuando era diputado PPD por Recoleta e Independencia.

Esta fue presentada el 19 de enero pasado por el abogado Juan Pablo Hermosilla, en la Fiscalía Oriente. El fiscal Francisco Lanas tomó la investigación.

Puertas adentroEl 31 enero de 2006, María Eugenia Soto tenía 26 años. En la cocina de su casa en Chillán dice a "Sábado" que trabajaba en Santiago, cuidando a la madre de María de los Ángeles Swinburn, esposa de Hales, cuando supo que su propia madre había fallecido. Una nota en El Mercurio, el 1 de febrero de ese año, recuerda lo que pasó: "Los cuerpos sin vida de una pareja fueron encontrados ayer en una vivienda de un sector rural de la comuna de San Ignacio (Octava Región).

Según los primeros antecedentes, Segundo Contreras Contreras hirió con arma blanca a su conviviente, Laura Sáez Navarrete, en el cuello y la cara causándole la muerte. Luego salió al patio y se ahorcó en un árbol".

Laura Sáez era la madre de Soto. Vivía en un pueblo a 34 kilómetros al sur de Chillán con su nueva pareja y Matías Valdebenito, el hijo de María Eugenia Soto. Al día siguiente, cuando salió ese artículo en el diario, la madre de Swinburn también falleció. María Eugenia pensó que tendría que regresar a Chillán a hacerse cargo de su hijo, de 7 años.

-Don Patricio sabía lo que le había pasado a mi mamá. Él me propuso que fuera su empleada y que Matías se fuera a vivir conmigo a su casa, para poder estar con él. Me dijo que me ayudaba a buscarle un colegio. Así que acepté -recuerda ella a "Sábado".

Tras eso fue cuando, según María Eugenia Soto, comenzaron los abusos. Y que no se detuvieron hasta que renunció, en 2012. Así explica ella a "Sábado" por qué permaneció trabajando en esa casa durante tanto tiempo:

-Mi mamá había fallecido, no tenía para dónde ir. Estaba con mi hijo. Ahí al menos le tenía la comida. Tenía una camita calentita. Yo pensaba, si me voy a Chillán, qué voy a hacer. Con puro cuarto medio no hago nada.

Luego de ser contactada por Isabel García-Huidobro, el l 6 de agosto de 2016, Soto viajó a Santiago. El relato que dio frente a Hermosilla permitía, a juicio del abogado, hacer una denuncia por abuso sexual y amenazas. Lo que diferenciaba el suyo de los otros testimonios era el tiempo. Los de Soto eran más recientes y como los abusos sexuales prescriben a los cinco años, eso importaba.

-Estas situaciones, si bien no eran extremas, sí eran intensas y denotaban un abuso de poder en esta asimetría de relaciones que trababa el señor Hales. Ameritaban una intervención formal y eso, en la práctica, significa ayudar a instalar el tema a través del sistema legal -explica Hermosilla.El 19 de enero de 2017, cuando fue puesta en la Fiscalía Oriente, la denuncia de María Eugenia Soto llegó a la prensa y The Clinic Online la publicó. Un día más tarde, Patricio Hales le envió una carta a ese medio con sus descargos:

"Respecto de lo publicado en su medio, deseo expresar que no me extraña que se intente continuar por distintas vías el caso que se ha querido construir en mi contra.

"Como es de conocimiento público, la Cancillería realizó, durante meses, un sumario administrativo que dejó sin efecto todas las denuncias y antecedentes presentados respecto de mi persona, todas las cuales fueron desestimadas.

"Por tanto, estoy tranquilo y confío en que ello será ratificado en esta nueva instancia".El 7 de febrero, María Eugenia Soto fue a la PDI a entregar su declaración policial voluntaria. Este es un extracto de algo que, según ella, vivió alrededor de octubre de 2006:

"Después de que murió su suegra, don Patricio cenó y luego me dijo que fuéramos a la salita a ver un programa de Aero Perú, un accidente donde murió un primo de él. Yo fui obligada. Estábamos solos, la señora se había ido a Cachagua, estaba asustada [...] él estaba sentado en un sillón, mientras yo estoy acomodando la televisión, dándole la espalda.

De repente él se para y me toma de las caderas, me rodeó con sus brazos, y me empuja hacia su cuerpo, cayendo los dos al sillón, yo sobre él, y ahí él empezó a frotarse en mi cuerpo. Sentía su (parte íntima) en mi trasero y él se movía de un lado a otro. Yo le tomé las manos, se las abrí y se las dejé sobre el sillón y arranqué de la pieza".

Ese año, según Soto, Hales y su mujer le regalaron una bicicleta para Navidad a Matías, su hijo. Esa fue la excusa que, según la declaración policial de Soto, Hales usó para llamarla a su pieza en marzo de 2007."Él estaba en bata, con su bata blanca de siempre, mostrando su desnudez debajo. Yo le serví el desayuno, me quedó mirando y me dijo: 'Quena, ¿cierto que le regalamos una bicicleta a Matías?'.

Yo le digo que sí, entonces dice 'pero la bicicleta hay que pagarla'. Ahí me toma el hombro, yo doy dos pasos atrás y quedo con mis piernas chocando con la cama, como atrapada. Entonces él me empuja a la cama como para encimarse sobre mí, caigo, pero no sé de qué forma logro girarme, hasta que quedo con las rodillas en el otro lado de la cama. Me paro y me dirijo hacia la biblioteca y ahí salgo. Él iba a abalanzarse sobre mí...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR