Noticias inquietantes desde el Oriente
Por un lado, se trata del séptimo terminal marítimo del mundo en movimiento de carga; por otro, es la sede de la Flota del Norte de la cada vez más poderosa Armada china. Y en Asia, seguridad y comercio van de la mano.
Eso explica que mientras hoy China esté disfrutando de su estatus de segunda economía del mundo, vaya expandiendo su presencia militar en mares de la región en medio de las disputas territoriales con sus vecinos.
Los líderes chinos asumen esta nueva realidad enviando un mensaje que dice "no queremos problemas, pero tampoco tenemos miedo a enfrentarlos". Ahora, como en China el significado de las palabras varía según el contexto en que se pronuncian, acá, un intento de traducción.
ESTADOS UNIDOS: Primero, Estados Unidos quería a China dentro de la economía global, e hizo gestiones para que se uniera a la Organización Mundial de Comercio.
Luego, la llamó un "socio responsable" en el sistema internacional, por su disposición a usar la diplomacia como recurso de actuación.
Pero ahora, cuando China es fuerte y capaz de superarlo en materia económica, EE.UU. empieza a buscar formas para contenerla, como profundizar alianzas con sus vecinos y reforzar la presencia militar en Asia.
Esa es la lectura que hace en Beijing el viceministro del Departamento Internacional del Comité Central del Partido Comunista Chino, Ai Ping.
Siempre con un tono positivo y en medio de un inmenso salón con el techo de 10 metros y aplicaciones de mármol, Ai advierte que a veces Washington tiende a interpretar "la capacidad como conducta".
Como en los últimos 35 años la economía china ha venido creciendo a tasas de 10% gracias a las exportaciones, Beijing ha desarrollado intereses que antes no tenía en materia de comercio exterior. Ahora, con tal de protegerlos, está construyendo unas fuerzas militares capaces de proyectar poder más allá de sus fronteras. Sin embargo, eso no significa que vaya camino a una colisión. Para muchos funcionarios y académicos, China solo se está fortaleciendo desde adentro hacia afuera.
Coevolución, coexistencia competitiva o rivalidad cooperativa, sea como se llame el nuevo modelo de relación que China y Estados Unidos están construyendo, hay consenso en que es un proceso sin precedentes entre dos sociedades altamente conectadas en lo económico y más distantes en lo político y militar.
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